La caricia de Bardhi

VALÈNCIA. La batalla del coliseo, un cuerpo a cuerpo que se libró en cada esquina, la resolvió un macedonio de 23 años con un gol de esos que los niños de mi generación dibujábamos en las libretas cuadriculadas, con aquellas rústicas tres dimensiones de trazo inseguro. Bardhi está pidiendo a gritos que fluya su renovación. Su franco directo de manual que acabó en la escuadra de Soria desatascó un encuentro hosco y trabado, pero no fue su único mérito. Su irrupción en el 45´ fue decisiva para contrarrestar la superioridad del Getafe -en fútbol y ocasiones-, asfixiante en el cuarto de hora anterior al descanso.

Los blaugrana -de blanquinegro- no fueron capaces en la primera mitad de sacar su mejor fútbol, ni el de toque ni el vertical. La medular se limitaba a achicar agua, con Rochina y Campaña desaparecidos en la creación; y Morales o Boateng apenas recibían en condiciones. En la retaguardia el Llevant, pese al 3-5-2 que tanto ha mejorado las prestaciones defensivas, cometió algunos errores que le pudieron costar caros: Pier en el 12´, habilitando al acoyano Molina o Postigo en el 30´ dejando a Maksimovic sólo ante Oier; el guipuzcoano salvó ambas situaciones

También hubo peligro en los centros al área y por la banda izquierda del ataque madrileño: Jason se fajó como un jabato para ayudar a Cabaco, pero Rochina no estuvo tan solícito a la hora de echar una mano como Campaña en la banda de Toño, donde ambos trabajaron de lo lindo. Prcic estuvo acertado por delante de los centrales, pero el Llevant sufría y apenas se asomaba al área rival. En todo caso, exceptuando el mano a mano de Maksimovic, el Getafe provocó más sensación de peligro que ocasiones claras.

Cuando mayor era el dominio azulón, el Llevant tuvo la suya: un latigazo de Prcic desde la frontal peinó el palo. Un minuto antes, en un córner (tan inocuo como de costumbre) secuestraron a Cabaco, en hora punta y a plena luz del día. Un penalti de libro que otros árbitros no dudan en pitar. En cualquier caso, los levantinos respiraron hondo cuando Munuera Montero envió al personal al túnel.

En la reanudación López sorprendió retirando a Prcic. Luego explicó que estava muy expuesto con una amarilla. Campaña entonces tomó la madeja, Rochina pasó a la izquierda, Bardhi a la derecha y todo cambió. El Llevant comenzó a tocar con criterio y dio un paso adelante, presionando incluso la salida del balón. Además no dejó de mostrarse tosco y peleón. Así estaban las cosas cuando llegó la caricia de Bardhi y el 0-1. El Getafe quedó contra las cuerdas y el Llevant no alcanzó a noquearlo: Boateng tuvo el 0-2 en el 65' y Toño la tiró al palo en el 71', tras un autopase de playstation.

A Cabaco se le subieron los gemelos y tuvo que marcharse en el 73'. Su ausencia encendió el pánico. El Getafe, aún sin crear ninguna ocasión clara en toda la reanudación, se volcó sobre el área de Oier y entonces el Llevant, a la contra, pudo sentenciar. No lo hizo pero al menos supo jugar con el cronómetro para evitar un sufrimiento excesivo. En estos últimos instantes Postigo aumentó, más aún, su envergadura repentinamente, dentro del área, y Campaña decidió que el reloj discurriera mientras el balón estaba en las botas de los granota.

El Llevant volvió a asaltar el escenario donde todo empezó para Paco López (y para todo el levantinismo, en realidad), esta vez con menos sufrimiento y de forma más justa. Supo darle al Getafe de Bordalás de su propia medicina: el Llevant le comió la moral en el cuerpo a cuerpo y, en la segunda parte, también, sacando el balón jugado y asustando a su línea defensiva. Sobre todo en la segunda mitad. Los granotes suman 10 puntos y dos victorias consecutivas antes de visitar el Bernabeu. Que tiemble Lopetegui, si aún está al mando para entonces.

Oier (8); Cabaco (7), Postigo (9), Pier (6); Jason (7), Rochina (6), Prcic (7), Campaña (7), Toño (7); Morales (5), Boateng (6).

Bardhi (9) 45' por Prcic

Pedro López (5) 73' por Cabaco

Mayoral (s.c.) 83' por Boateng

Gol: 0-1 59´ Bardhi