VALÈNCIA. El centrocampista del Valencia Carlos Soler ha cerrado con su presencia durante la última semana en los entrenamientos de la selección española que disputará el Mundial de Rusia, el año de su confirmación como futbolista de élite demostrada en su club a lo largo de toda la temporada.
Un año y medio después de su debut en el primer equipo del Valencia, Soler se ha despedido este sábado del grupo que dirige Julen Lopetegui sin haber podido debutar con la selección española absoluta, pero consciente de que se ha convertido en una de las apuestas de futuro del equipo nacional.
En diciembre de 2016, un Valencia en horas bajas vivió la esperanzadora noticia del debut con el primer equipo de Soler por decisión del italiano Cesare Prandelli, a quien su efímero y poco afortunado paso por el club de Mestalla no le impidió darse cuenta del potencial del canterano y darle una oportunidad en una de sus decisiones más acertadas.
Soler la aprovechó y a partir de enero, ya con Salvador González "Voro" al frente del equipo, se convirtió en un titular habitual en un grupo centrado en evitar el descenso y que tuvo en este jugador una de las contadas buenas noticias de la temporada.
Consecuencia de ello fue la ampliación de su contrato, anunciada el 16 de mayo del año pasado, todavía con Layhoon Chan como presidenta del Valencia. Soler pasó a ser jugador del club hasta 2021 con una cláusula de rescisión del contrato de ochenta millones de euros.
Tras la campaña de su debut, en la que marcó cuatro goles, llegó el inicio de la recién concluida, la de su confirmación gracias a que el nuevo técnico, Marcelino García Toral, contó con el futbolista desde el primer momento.
La principal novedad estuvo en la decisión de situarlo en la banda derecha a pesar de ser un jugador habituado a actuar en el eje de la medular. La presencia de Dani Parejo y Geoffrey Kondogbia le cerraba el paso en su posición natural.
En un principio se llegó a interpretar que forzar a Soler en la banda era una forma de reclamar más efectivos para esa posición, pero a la larga se demostró que Marcelino contaba con él como titular para ese puesto, lo que no impidió que lo reubicara ocasionalmente en el centro ante las ausencias de Parejo y Kondogbia. Allí también ofreció un excelente resultado.
En la campaña 17-18, Carlos Soler solo ha marcado un gol, el obtenido en la segunda jornada de Liga en el empate a dos ante el Real Madrid en el Santiago Bernabeu, pero su aportación al grupo ha sido superior al del año de su debut, ya que ha dado muestras de madurez y de una gran competitividad.
Con 21 años, nacido en la ciudad y con toda su carrera deportiva vinculada al Valencia, el jugador siempre ha mostrado su satisfacción por haber llegado a debutar en el equipo al que ha seguido desde niño y por la oportunidad de poder desenvolverse sobre el césped de Mestalla junto a futbolistas a los que no hace demasiado tiempo veía desde la grada en los partidos que el equipo disputaba en casa.
Habitual en las selecciones inferiores, la guinda de una magnífica temporada en lo personal y en lo colectivo le ha llegado con el curso ya terminado, al haber entrado en los planes de Lopetegui para ayudar a preparar el Mundial.
Soler ha podido disfrutar de una magnífica semana antes de empezar las vacaciones para volver al trabajo con el equipo en julio, cuando estará llamado a ser una de las claves del proyecto del club para la campaña 2018-2019.
