CASTELLÓ. Carlos Delgado ha convencido en su regreso a la titularidad del Castellón tras más de un año sin formar en el once inicial albinegro. El defensa andaluz, quien la pasada temporada actuó como cedido en la liga india, ha reafirmado su valía a su vuelta a la competición frente a uno de los rivales más exigentes de Segunda División como es el Leganés.
El central ocupó la plaza de Rafa Gálvez, sancionado por su expulsión por doble amonestación frente al Logroñés, y fue uno de los más destacados de su equipo, que acabó cerrando todas las vías de acceso que buscaba el Leganés con un trabajo defensivo impecable. “Ha hecho un partido soberbio”, reconoció Óscar Cano a la conclusión del encuentro.
Delgado fue titular habitual en la campaña 2018/19, la del regreso de los albinegros a Segunda División B y en la que se incorporó al banquillo Cano tras las destituciones de Sergi Escobar y David Gutiérrez. Sin embargo, la permanencia del de Puerto Real en el Castellón tras su vuelta del fútbol indio nunca estuvo del todo clara después de que Cano se decantara por futbolistas de otro perfil en su posición para competir en Segunda División. Aun así, tanto el jugador como el club han optado por la continuidad, descartando un movimiento de salida antes del cierre del mercado.
“Es un jugador que lleva tiempo con nosotros y que sabe lo que queremos. La duda era comprobar qué nivel de insatisfacción podía soportar porque le iba a costar entrar. Él partía con desventaja respecto a Adrían Lapeña, Rafa Gálvez y Eneko Satrústegui, pero al final ha entrado antes de lo que presagiábamos”, ha manifestado el técnico del Castellón, que ha aclarado que la salida del jugador en la campaña 2019/20 no se debió a un descontento del cuerpo técnico por su rendimiento en el equipo. “La temporada pasada salió cedido por un tema económico derivado de su alta ficha y porque la oferta que recibió de la India era irrechazable, pero nosotros no hemos tenido nunca dudas sobre él”, ha precisado.
Ahora le ha llegado la oportunidad aprovechando la baja por sanción de un pilar en la defensa albinegra como es Rafa Gálvez. Su buen papel ante el Leganés supone un espaldarazo para el gaditano y la confirmación de que la plantilla del Castellón dispone de recursos fiables en la línea defensiva para competir en Segunda División.