ALICANTE. En la Delegación Central de Grandes Contribuyentes de la Agencia Tributaria están más que contentos con el Elche y es que el club franjiverde va a pasar en menos de dos años de aparecer en la lista de grandes morosos con el fisco por una deuda de diez millones de euros a reducir la misma a poco más de cuatro.
Lo anterior ha sido posible gracias al cumplimiento estricto del convenio suscrito con Hacienda en otoño 2017 para cancelar en un máximo de ocho años esa deuda que tiene naturaleza de privilegiada en el concurso de acreedores, algo que en gran medida se debe al auxilio del expresidente José Sepulcre que ha dotado de músculo financiero a la entidad por medio de préstamos participativos el ejercicio pasado (que por ejemplo permitieron el pago al fisco de la cuota de algo más de 300.000 euros de importe que se devengaba el 20 de marzo de 2018)
y acudiendo a las diferentes ampliaciones de capital convocadas en el presente: a través de Tenama Inversiones, Sepulcre ha suscrito más de tres millones de euros en acciones en el marco de dos operaciones de aumento de capital por aportaciones dinerarias, la segunda de 1,7 millones de importe que se completaba formalmente la semana pasada (la totalidad del dinero la tenía ya el club en enero en sus arcas) y que convierte a la citada mercantil en titular del 56% de las acciones del Elche.
El convenio (acuerdo de aplazamiento) vigente obliga a la entidad del Martínez Valero a desembolsar cada ejercicio diferentes cantidades por variados conceptos y que en el presente, al militar el primer equipo franjiverde en Segunda División A, son las siguientes:
Este miércoles, por tanto, el Elche habrá abonado a la Agencia Tributaria en este ejercicio más de cuatro millones de euros: el 25% de la deuda al inicio del mismo; nueve de las 12 cuotas de 50.000 euros con cargo a los ingresos de televisión (lo que implica el pago de 450.000 de los 600.000 euros); y los 1,7 millones derivados de la operación de Sory Kaba. Dicho de otra manera, habrá reducido en los últimos nueve meses su deuda a la mitad y desde noviembre de 2017 en un 60% un crédito privilegiado de 9,9 millones de importe: a la firma del aplazamiento pagó una cuota de entrada del 10%, algo más de 970.000 euros; cantidad a la que hay que sumar los citados 320.000 euros de la cuota de hace justo un año; y los 4,5 de los últimos nueve meses.
Garantías
Además del pago de la citada entrada de 970.000 euros (que salieron de los dos millones que le corresponden al club del valor patrimonial total de la LFP), el Elche pudo suscribir el citado convenio singular porque ofreció una serie de garantías reales que el fisco aceptó (inicialmente le exigía avales bancarios, pero al tratarse de un primer acuerdo de aplazamiento flexibilizó sus exigencias), 25 fincas registrales de su titularidad que no son otra cosa que el estadio Manuel Martínez Valero y sus bajos (su valor de tasación es de 52 millones de euros).