Las primeras señales del Valencia de Celades

VALÈNCIA. El pasado martes en Londres se pudieron apreciar las primeras señales del Valencia de Celades. El técnico catalán aprovechó su segundo partido en el banquillo para dar algunas pinceladas de lo que quiere implantar para mejorar las prestaciones del equipo. El cambio más evidente fue en un sistema moldeable que partía de un 4-4-2 en defensa para convertirse en un 4-3-3 en fase ofensiva. 

En cuanto al aspecto defensivo, el Valencia siguió fiel a sus dos líneas de cuatro en campo propio para dar seguridad a los centrales, que sufren cuando tienen terreno que cubrir a la espalda. Esa apuesta le salió bien al técnico, que sí que ordenó algunas variaciones respecto al libro de Marcelino García Toral. Una de las variantes que experimento el Valencia contra el Chelsea fue la presión. El equipo tuvo un repliegue menos estricto que otras veces, incluso llegando a presionar la salida en campo contrario en alguna jugada. Si los ingleses superaban la primera línea, el Valencia volvía a defender en bloque bajo como acostumbra. 

En ataque, la formación se modificaba hacia el 4-3-3. Con Kondogbia como enlace con la defensa en la salida de balón, Parejo se ubicaba como interior junto a Coquelin, que se acercaba al centro del campo para apoyar la circulación. Su hueco en la banda lo ocupaba Rodrigo en una posición de extremo derecho, dejando a Gameiro como única referencia ofensiva. Precisamente en esa labor se vio muy cómodo a Maxi Gómez cuando salió por el francés a falta de veinte minutos. 

Por otro lado, el carácter asociativo tuvo mucha más incidencia que en la mayoría de encuentros de la etapa de Marcelino. Celades buscó menos el ataque directo y la transición rápida. El Valencia buscaba protegerse en algunos momentos con el balón e incluso arriesgando varias entregas por el centro, una situación que no le gustaba a Marcelino por la penalización que podía llegar por alguna pérdida en zonas comprometidas. Esta puesta en escena permitió ver la mejor versión de los futbolistas más técnicos como Kondogbia, Parejo y en especial a Rodrigo Moreno, cuyos movimientos por la banda hacia el centro fueron determinantes.

Sin embargo, los primeros trazos de Celades en el Valencia CF dejaron un cambio significativo en cuanto a la elección de las piezas del engranaje. Guedes no jugó ningún minuto en la nueva disposición táctica de Celades. El portugués sí que participó en el Camp Nou, donde estuvo desacertado. Tendrá que reengancharse los próximos partidos a lo que le pida el técnico si quiere quitarle el puesto a Cheryshev. 

Por último, la estrategia fue otro de los aspecto donde Celades dejó huella. El propio Parejo reconoció que habían trabajado la pizarra en los últimos días y acabó siendo decisiva para sumar los tres puntos. Además, el Valencia no solo generó peligro en la falta que acabó en gol, también lo hizo en un córner que Parejo sacó raso y que Gameiro mandó arriba tras un buen desmarque.