VALÈNCIA. A Baraja le 'baila' un puesto. A un partido para que concluya la primera vuelta, el técnico valencianista ha sentado las bases de su equipo con un bloque fijo que ha protagonizado el grueso de los minutos de la competición liguera. De hecho, en la cabeza de los aficionados valencianistas se visualiza un once 'tipo' de Baraja con solo una vacante ofensiva en banda o de 'enganche' en la que nadie ha conseguido asentarse.
En la portería, Giorgi Mamardashvili lo ha jugado todo, pero la línea defensiva también tiene bien marcada la jerarquía. Gayà y Thierry Rendall se han impuesto con claridad en los carriles mientras que en el eje la irrupción de Mosquera lo ha erigido como indiscutible. Diakhaby hasta su lesión también ha sido una pieza básica y está por delante de Paulista en la rotación.
En el centro del campo, el equilibrio lo otorga Pepelu y el siguiente nombre que le acompaña es el de Javi Guerra. El doble pivote ha sido una constante toda la temporada más allá de colocar a Diakhaby en esa zona las tres primeras jornada de LaLiga.
Con esos cimientos asentados, Baraja también tiene tres soldados imprescindibles para su ataque. Hugo Duro es la referencia ofensiva mientras que Fran Pérez es fijo en la derecha. Diego López es el 'multiusos' de Baraja para colocarlo en la izquierda o por detrás del punta en función de las alternativas que dispone para completar el once.
¿Y el puesto restante? No se puede negar que Baraja ha dado oportunidades a varios jugadores, pero sin éxito. Amallah, Sergi Canós, Yaremchuk y Foulquier son las opciones que ha 'tocado' Baraja para encontrar el 'último hombre' que complete su once gala, pero ninguno ha ofrecido los argumentos suficientes para considerarse titular en el Valencia CF de Rubén Baraja.