VALÈNCIA. Mucha ilusión y pocos futbolistas. Así se presenta el Levante esta tarde en El Molinón, a vueltas con el problema de las inscripciones, ya clásico en la mayoría de clubes de La Liga y también en el conjunto de Orriols. No es la primera vez que los blaugrana se enfrentan a tal tesitura en la primera cita de la temporada -ya, hace dos, hubo de dejar sin inscribir a Joan Femenías durante los primeros envites del curso-. Tampoco será el Levante el único que ha habido de priorizar jugadores a la hora de registrarlos en competición -el Getafe jugó el jueves en San Mamés con solo 15 piezas del primer equipo y 18 hombres en total-.
Es el gran dilema para el encuentro de hoy ante el Sporting de Rubén Albés. Este Levante todavía está en pañales. El club inscribió a Morales, que bien podría ser el portador del brazalete por la no presencia de los otros tres. A partir de ahí, el once que coloque Julián Calero es toda una incógnita. Si por el preparador madrileño fuese, contaría con Pablo Martínez no solo para esta tarde sino como piedra filosofal del resto de la temporada. Sin embargo, la probable salida del '10' complica ese deseo. Calero cuenta con él y espera que el viento del mercado no se lleve por delante a su jugador franquicia, pero los últimos coletazos del período de traspasos bien pueda acabar con Pablo en Primera División, donde acumula pretendientes que también aguardan a encajar sus respectivas medulares.
Las dudas son infinitas, pero al menos el termómetro de la ilusión ha vuelto a calentarse con Calero en casa. La pretemporada ha ido bien. El equipo se ha mostrado serio y, sobre todo, ordenado. El 4.3.3 parece ser el sistema que, sobre el papel, mejor ha funcionado. Con estructura marcial en retaguardia y extremos abiertos, con Morales permutando en punta, donde residen Bouldini o Iván Romero. Y además, con las buenas versiones de Pablo, Carlitos y Andrés García, que tendrá esta temporada, por contrato, ficha de primer equipo. Si la esperanza por pelear las plazas de playoff no está por las nubes, es por los vaivenes del mercado y la estrechez del Fair Play Financiero granota que obliga a no descartar terremotos de última hora.
El técnico local, Rubén Albés, solo cuenta con 18 futbolistas en su primera plantilla pero dos de ellos, el central Rober Pier y el delantero Jordy Caicedo son bajas por lesión y el extremo Dubasin es seria duda por lo que el técnico tiene varias posiciones en las que solo cuenta con un efectivo y deberá echar mano de canteranos.
La defensa es la línea más afectada ya que en el lateral derecho solo está Guille Rosas y para la pareja de centrales con Eric Curbelo y Diego Sánchez, solo en el lateral izquierdo tiene alternativas con Cote y Pablo García, si bien será el primero quien salga de inicio.
En el centro del campo es donde Albés tiene más alternativas pero por lo visto a lo largo de la pretemporada lo más probable es que de inicio salgan dos de los fichajes Bernal y Olaetxea con Nacho Méndez en una posición más adelantada de la que habitualmente ocupó la pasada temporada.
En la delantera no podrá contar con Caicedo y Dubasin, será duda hasta última hora por problemas en la espalda lo que deja a Otero y Gaspar Campos como seguros y la alternativa de Campuzano o Queipo para el caso de que Dubasin no pueda jugar.
Sporting de Gijón: Yáñez, Guille Rosas, Eric Curbelo, Diego Sánchez, Cote, Bernal, Olaetxea, Nacho Méndez, Dubasín, Otero y Gaspar Campos.
Levante UD: Andrés Fernández, Andrés García, Elgezábal, Cabello, Marcos Navarro, Oriol Rey, Kocho, Carlos Álvarez, Brugui, Morales, Bouldini
Árbitro: Guzmán Mansilla / Gorostegui Fernández-Ortega (VAR)
Estadio: El Molinón.