Amadeo Salvo vive enamorado de su mentira

VALÈNCIA. Les voy a decir de entrada una pequeña tontería, pero si se lo digo es simplemente porque así lo siento. Miren, a un tipo que acaba de celebrar su cumpleaños y que, como una especie de regalo al valencianismo, afirma que en la venta del Valencia a Peter Lim él no tiene nada que ver, que la responsabilidad es lo de los patronos de entonces de la fundación y que él no es en absoluto responsable, no le pienso felicitar por su cumpleaños y simplemente me produce una vergüenza terrible por semejante comentario. 

Viaje al pasado

Miren, la verdad en todo el proceso de venta a Peter Lim es que la mayoría del valencianismo sí que aplaudió semejante operación. Incluso, seamos sinceros, todo el valencianismo abrió los brazos a semejante comprador y solo el paso del tiempo y miles de decisiones del propio Peter Lim, que han resultado del todo absurdas, han acabado por provocar un giro brutal en la opinión hacia Lim de la mayoría del valencianismo; digo de todos esos valencianistas que sienten que Peter Lim nos está tomando el pelo y que encima lo está haciendo con la ley de su parte.

La vergüenza

Ahora dejo de hablar del pasado para dar un giro urgente al presente más actual. Y ese presente es cabezón y nos indica que Salvo no se siente en absoluto responsable de la llegada de Peter Lim, ni de la compra de Peter Lim. Salvo dice que la responsabilidad es exclusivamente de los patronos y pienso que con esas declaraciones lo que intenta es no ser un responsable real de esa maldita compra de nuestro Valencia. Salvo se escuda en un protocolo, se quita toda responsabilidad legal y elude de forma grotesca su propia responsabilidad.

Amadeo y Aurelio

Bien, para ser franco, elude toda responsabilidad del personal, de cualquier personal, que en su día aplaudió la llegada de Peter Lim al Valencia. Lo grave del asunto no reside en haber metido la pata como pasó en su día. Lo grave y lo lamentable en el caso que nos ocupa es lavarse las manos de forma indigna tomando el pelo a todo el valencianismo actual. Las últimas declaraciones de Salvo son vergonzosas y espero que en el futuro le pasen factura. Pensar que todo el valencianismo está bobo solo lo puede pensar alguien que es bobo de verdad. Y eso es una vergüenza de un tamaño descomunal.

Dos pequeñas verdades 

Miren, les voy a ser franco y les voy a decir lo que pensé en su día de la hipotética compra de Lim y de mis afirmaciones ocultas pronunciadas a dos altos ejecutivos de Bankia en una reunión especial y medio secreta que tuvo lugar en Valencia, en el mercado de Colón, días antes de que Bankia fallara a favor de la oferta de Lim. La reunión fue sencilla y en dicha reunión les dije a los de Bankia que sería un grave error venderle a Peter Lim y que eso haría un daño terrible al Valencia. Ojo, en esa reunión me pude equivocar e incluso luego también aplaudí públicamente la venta del Valencia, pensando que me podía haber equivocado afirmándole a Bankia que estaba en contra de esa venta.

Pasa el tiempo

Pero el tiempo ha pasado y ahora me doy cuenta que tenía razón en todo lo investigado. Ahora bien, una cosa es que yo tuviera razón y otra muy distinta que Amadeo Salvo eluda hoy en día toda responsabilidad de la venta a Peter Lim. El tiempo, como pueden apreciar, pone a cada uno en su sitio y estimo que el sitio en que se ha colocado Salvo dice muy poco de la honestidad y fiabilidad de semejante sujeto. El Valencia está herido casi de muerte y esa herida la ha provocado, especialmente, un señor llamado Amadeo Salvo. Y lo grave del tema es que ese señor parece vivir permanentemente enamorado de su mentira.