Hoy es 25 de noviembre
GRUPO PLAZA

entrevista proyecto fer

Ángela Vendrell, la jugadora de baloncesto en EEUU que sueña con volver a España y triunfar en Liga Femenina

La valenciana deportista del Proyecto FER está actualmente cursando sus estudios en la Universidad de Alabama Birmingham en la Liga Universitaria pero tiene la mirada puesta en fichar algún día por un equipo español de la Liga Dia con el que ganar el campeonato

5/10/2018 - 

VALÈNCIA. No todos los deportistas del Proyecto FER se encuentran dentro de nuestras fronteras y Ángela Vendrell (17/01/1998, Alicante) es una de ellos. España se le quedaba pequeño para poder mantener su pasión por el baloncesto y los estudios al mismo tiempo así que se fue a Estados Unidos, país puntero en este deporte. Pero las raíces siempre tiran de nosotros y a alero/ala-pívot de 1,85 metros le gustaría en un futuro regresar España para fichar por un equipo de Liga Femenina 1 con el que pueda llevarse el campeonato.

El baloncesto es un deporte que atrapa y Ángela se dio cuenta en cuanto tuvo contacto con la pelota: “Mis primeros pasos en el baloncesto fueron cuando iba a quinto de primaria porque mi mejor amiga, en ese entonces, se apuntó a la escuela municipal y me convenció para ir con ella. Me gustó porque además de que se me daba cada vez mejor con el tiempo, también disfrutaba de la desconexión que sentía de todo lo demás cuando tenia un balón en la mano”, cuenta la deportista del Proyecto FER.

Lo cierto es que a medida que iban pasando los años y mejoraba la proyección de Ángela, se iba encontrando con obstáculos para poder jugar al máximo nivel al mismo tiempo que cuidaba sus estudios. La valenciana explica que “compaginar los estudios y el deporte de alto nivel siempre ha sido lo más problemático y desafiante por lo que he tenido que pasar durante mis años como jugadora de baloncesto. Ahora es más fácil ya que aquí en Estados Unidos te ayudan a compaginar las clases y los exámenes con tu horario de entrenamientos. Pero cuando estaba en segundo de bachiller en Valencia tuve que hacer muchos sacrificios. Solía quedarme hasta las tantas de la madrugada estudiando después de cada entrenamiento o si acababa de entrenar a las 12 de la noche, me solía despertar muy pronto por la mañana antes de ir a clase a estudiar”.

Por eso mismo, en Norteamérica vio un destino ideal en el que formarse académica y deportivamente por muchas razones. “Quería aprender inglés ya que ahora es muy importante para encontrar trabajo. También quería jugar a baloncesto en USA ya que es el país número uno en este deporte. Otra de mis ilusiones era venir aquí porque me encantan las costumbres americanas y la forma que tienen de ser. Y una de las razones más importantes es que quería sacarme la carrera aquí ya que sería más fácil compaginarse con el baloncesto y los estudios”.

La jugadora asegura que “mi vida desde que llegué ha sido toda una experiencia única que va mejorando con el tiempo. Me encanta mi universidad y mi equipo y soy muy afortunada de estar donde estoy”. Y de buena parte de esa felicidad tiene culpa el Proyecto FER, que desde España ha estado ayudando a la baloncestista: “Es un orgullo como valenciana pertenecer a este proyecto valenciano. Económicamente ha sido una buena ayuda para mi progresión deportiva”.    

Ángela Cursa el grado en Business en la Universidad de Alabama Birmingham, equipo con el que consiguió todo un hito la pasada temporada cuando “ganamos la liga regular por primera vez en la historia de la universidad y nos dieron un anillo como medalla”. Por desgracia, en el playoff se quedaron a las puertas de clasificarse para el torneo de la NCAA, “lo más prestigioso que hay en la competición universitaria” según la alicantina, pero “perdimos la final contra el equipo que quedó segunda en la liga después de nosotras”.

Una cuenta que queda pendiente para esta campaña. “Mis próximos retos son mejorar mi baloncesto y aportar más para mi equipo. Y espero ganar otra vez la liga regular y conseguir ir al tornero de la NCAA”, confiesa Ángela.

La calidad en cuanto a baloncesto de las universidades en Estados Unidos es máxima, lo que aumenta exponencialmente las exigencias y la dureza para sus jugadores. Para la valenciana, “lo más duro de este deporte es mantener la forma tanto física como mentalmente durante toda la temporada. Aquí en Estados Unidos se juegan dos partidos por semana y se entrenan los demás días. Solo tenemos un día de descanso que son los domingos. Dicho esto, las dificultades con las que me suelo encontrar es ser regular y constante durante toda la temporada. Siempre hay semanas que me viene el bajón físico o mental pero es algo que cada deportista de alto rendimiento atraviesa durante competiciones”. 

Pese a que han pasado ya dos años desde que la jugadora cruzara el Atlántico, su pasado jugando a baloncesto en España es lo que mejor guarda en su memoria: “Me siento muy orgullosa de muchas cosas durante mi carrera como deportista pero me hace especial ilusión recordar la medalla de bronce en el campeonato de clubes de España que conseguí con el Picken Claret cuando era Junior de segundo año. Teníamos un equipazo pero nadie se esperaba que llegáramos tan lejos y además fue un año muy duro con los estudios pero dio su recompensa”.

Al mismo tiempo que su pasado en España permanece, a Ángela le aguarda un gran futuro en territorio nacional. Eso es lo que más desea. La deportista confiesa que “mi máxima aspiración es jugar en un buen equipo de Liga Femenina 1 en España y ganar”. Quién sabe si cuando termine su etapa en Estados Unidos, Ángela se convierte en una valenciana más en el Valencia Basket femenino.

Y en un momento tan dulce del baloncesto femenino español es inevitable preguntarle a Ángela por la selección femenina, que recientemente se ha colgado el bronce en el Mundial que se celebraba en Tenerife. La deportista se siente “muy orgullosa de lo que nuestras chicas han hecho por el deporte femenino en nuestro país. Llevan trabajando muy duro todos estos años para llegar donde están y están siendo todo un ejemplo a seguir para todos los deportes femeninos”. Y precisamente una de las artífices de esa medalla es también su espejo en el que mirarse: “Admiro mucho a Alba Torrens, es una excepcional jugadora de baloncesto y persona, toda una referente a seguir”, admite Ángela.

Noticias relacionadas

next

Conecta con nosotros

Valencia Plaza, desde cualquier medio

Suscríbete al boletín VP

Todos los días a primera hora en tu email