VALÈNCIA. El Levante ha sufrido una radical transformación desde la llegada al banquillo de Javi Calleja, ya que en menos de dos meses ha lanzado al equipo valenciano a la tercera plaza, a solo un punto del líder, y lleva once jornadas seguidas sin conocer la derrota.
Tras el despedido de Medhi Nafti el 10 de octubre, con el equipo con apenas diez puntos y sólo dos por encima de la zona de descenso, el Levante ha logrado cuatro empates y siete victorias, aunque los dos primeros triunfos fueron con el director deportivo, Felipe Miñambres, como entrenador interino.
Calleja ha dado la vuelta por completo a un equipo timorato en ataque, sin claridad en el juego y cuya única virtud en el inicio de temporada fue su solidez defensiva, salvo alguna actuación puntual como la derrota contundente sufrida en Andorra por 3-1 en el penúltimo partido de Nafti.
El mejor resumen de cómo Calleja ha cambiado la cara al Levante fue la exhibición dada este lunes en Mendizorroza ante el Alavés. El Levante dominó de principio a fin, marcó dos goles, tuvo tres ocasiones claras para golear y apenas sufrió en defensa ante un equipo que todavía no había perdido en su estadio.
Con una defensa de cuatro jugadores, en la que Vezo y Álex Muñoz son indiscutibles, y un centro del campo con tres futbolistas y para el que cuenta con Iborra, Pepelu, Campaña y Pablo Martínez, el entrenador madrileño ha creado una sólida estructura que ya acumula diez partidos esta temporada sin que le marquen.
Acostumbrado al fútbol de ataque y combinativo, Calleja tiene a su disposición a Joni Montiel, Brugué, De Frutos o al ahora lesionado Rober Ibáñez para crear todo el fútbol imaginable y los implicados, como reconoció el propio Joni la semana pasada, están encantados con este sistema.
El único pero de la etapa de Calleja ha sido la falta de puntería, como le ocurrió en el partido de la semana pasada en casa ante la Ponferradina, pero el marroquí Bouldini ya lleva cuatro goles y, de momento, es capaz de hacer olvidar la falta de eficacia del brasileño Wesley, ya que Roberto Soldado está lesionado y no jugará hasta 2023.
El Levante, además, puede redondear este sensacional final de año con la posibilidad de asaltar el liderato, ya que este domingo recibe al Eibar, que tiene un punto más que el Levante, y en el caso de que logre el triunfo podría acabar primero si la UD Las Palmas no gana su partido.