VALÈNCIA. La brillante actuación en Anoeta del meta Dani Cárdenas, que evitó la goleada de la Real Sociedad (1-0), ha abierto el debate en la portería del Levante, ya que el equipo afronta el último tercio del campeonato sin un portero claramente titular tras haberse repartido los últimos partidos entre el catalán y Aitor Fernández.
De los últimos cinco partidos del Levante, Cárdenas ha jugado dos en la Liga, mientras que Aitor ha participado en otros dos en Primera División y el correspondiente a la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey ante el Athletic Club.
El técnico Paco López, de este modo, ha dado una vuelta de tuerca a la tradicional alternancia de los porteros en las distintas competiciones, porque hasta hace menos de un mes Cárdenas había sido el guardameta titular en la Copa del Rey y el habitual suplente en la Liga.
El plan parecía cantado, pero el entrenador del Levante López tenía una idea distinta y cuando colocó a Cárdenas en el Wanda Metropolitano el pasado 20 de febrero sorprendió a la mayoría y lo hizo todavía más cuando Aitor jugó la Copa ante el Athletic el pasado jueves.
Sin embargo, y lejos de dar por cerrado el debate, Paco López contribuyó con su decisión en San Sebastián a alimentar las dudas sobre quién es actualmente su portero favorito y quién será, ahora que el Levante ya está fuera de la Copa, el portero titular en la Liga hasta el final de la temporada.
“Soy el entrenador más feliz del mundo. Estoy muy tranquilo con los dos”, dijo recientemente Paco López en una rueda de prensa y aparentemente el rendimiento de ambos le da la razón, porque tanto Cárdenas como Aitor han brillado en sus actuaciones.
La explosión de Cárdenas, de 23 años y sin experiencia hasta este curso en la élite, ha llamado poderosamente la atención. Ya fue bueno su debut en Primera en Valladolid en noviembre, mejoró su participación en la Copa y fueron muy destacadas sus paradas en el Wanda y el pasado domingo en Anoeta.
Aitor, por su parte, no ha tenido un curso fácil. Al triste fallecimiento de su padre, que le apartó lógicamente de un partido en Bilbao, se le unió una lesión en los testículos en noviembre que ha arrastrado buena parte de la temporada, pero que no le ha perjudicado sobre el césped.
El meta vasco, además, fue el portero que más paradas hizo el curso pasado en la Liga y fue Paco López quien solicitó su fichaje en 2018 porque lo conocía de las categorías inferiores del Villarreal.
Con ambos porteros en plena forma, ahora Paco López debe despejar la duda de cara al derbi del próximo viernes ante el Valencia CF, aunque una vez pasado ese partido habrá que comprobar si su es decisión definitiva o está dispuesto a mantener la alternancia bajo palos.