VALÈNCIA. Mestalla decide. El Valencia cuajó una buena actuación en la ida de las semifinales de la Copa del Rey contra el Athletic de Bilbao y ahora apelará al apoyo del valencianismo para volver a pelear por el título copero tres años después. Un buen resultado pese a unas decisiones arbitrales que condicionaron la ventaja con la que se marcha el Valencia del encuentro de ida.
El Valencia se marchó de San Mamés orgulloso por el nivel desplegado en un escenario complicado, pero con la sensación de impotencia por tres decisiones arbitrales que generan recelo en la forma que influyeron en el marcador. Una falta inexistente de Carlos Soler propició el 1-0 de Raúl García, una dura entrada de Dani García sobre el canterano no fue castigada con la roja y un penalti más que evidente sobre Hugo Duro en el tramo final lastraron al Valencia ante el Athletic.
La primera media hora del Valencia en 'La Catedral' fue seria. Entró con valentía y presionó con inteligencia al Athletic. Sin embargo, la falta de precisión en el último pase le impidió generar más peligro de lo que se presumía. Mientras tanto, Raúl García volvió a aparecer para 'vacunar' al Valencia en una jugada a balón parado. Con el 1-0, fueron los peores momentos del partido. El Valencia quedó desubicado y le costó recuperarse del golpe. Se llegó al descanso y no desaparecieron las malas noticias con la expulsión de Maxi Gómez que pese a ser suplente no estará en al vuelta por protestar al colectivo arbitral en el túnel de vestuarios.
En la segunda parte, el Valencia no se escondió y poco fue recuperándose. El duelo estaba trabado, pero los de Bordalás fueron ganando terreno hasta que Guedes conectó un centro y Bryan Gil remató a portería. Aguirrezabala despejó como pudo y ahí apareció Hugo Duro para tocarla a la red y poner el empate. La historia del valencianista con el torneo doméstico es de película. El madrileño tuvo otra oportunidad en un centro de Gayà, pero no tuvo acierto. En el tramo final llegó una decisión que volvió a agigantar las dudas sobre el VAR. Vivian atropelló con el pie y el brazo a Hugo Duro sin opción de jugar el balón dentro del área. Ni Munuera Montero ni el VAR señalaron una pena máxima muy clara. Finalmente, el duelo acabó en tablas. Mestalla, es tu turno.