De la afición y el aficionado

VALÈNCIA. Esta semana nos desayunábamos con la siguiente noticia: el Valencia tiene la afición más fiel de LaLiga. Así lo demuestran los datos de asistencia a Mestalla, con un 87´6% de media en cada partido. Es decir, unos 43.276 seguidores se dan cita en el coliseo de la Avenida de Suecia cada fin de semana para ver jugar a su equipo. Este porcentaje supera a clubes como el Real Madrid, Betis y Athletic, siguientes en la clasificación ofrecida por el portal Transfermark, y sitúan al Valencia a la altura de las grandes aficiones del mundo junto a las del Dortmund, Bayern o Manchester United, que lideran la lista a nivel global.

Si el Valencia fuera líder en LaLiga, hubiera fichado a un ídolo del fútbol mundial, o incluso rebajado a la mitad el precio de los abonos, éstos datos de asistencia no serían de extrañar. Pero tal y como está el Valencia, la información que revela el portal web es cuanto menos sorprendente. Porque el club no firmó a ninguna estrella el pasado verano (es más, a excepción de Pepelu, los refuerzos son más que dudosos), los resultados tampoco invitaban al optimismo (se peleó hasta el final por no descender), ni Meriton acondicionó Mestalla en su Centenario hasta convertirlo en un recinto cómodo para ver el fútbol. Sobre todo los días de lluvia, que hay goteras.

A la afición del Valencia, tal y como canta Joaquín Sabina, “le sobran los motivos” para no ir a Mestalla los domingos. Pero lo cierto es que cada fin de semana asistimos a una peregrinación multitudinaria de la hinchada al estadio para animar a su equipo. Esto que ocurre jornada tras jornada es un dato digno de estudio sociológico, psicológico o incluso científico. ¿Qué sé yo?. Al principio pensé que podía ser Síndrome de Estocolmo, ese fenómeno paradójico en el cual la víctima (la afición) desarrolla un vínculo positivo hacia su captor (Peter Lim), como respuesta al trauma de su cautiverio. Pero, pensándolo bien, creo que hinchada es mucho más inteligente que todo eso. Estoy convencido que el valencianismo sabe separar lo que es un club centenario y con un sentimiento heredado como el Valencia, del sátrapa que lo tiene secuestrado.

LA ÚLTIMA BALA DE QUERALT.-  Juan Martín Queralt, líder de la plataforma De Torino a Mestalla, presentó el Proyecto 112CVF. Su objetivo es recuperar el Valencia de las manos de Peter Lim. Queralt anunció que si esta iniciativa fracasa, abandonará la escena valencianista. Es la última bala de su cargador. Vamos a ver la respuesta de la afición. Ojalá tenga el mismo calado que la asistencia a Mestalla. Pero a mí me recuerda a la mítica frase de Arturo Tuzón: “el Valencia será lo que los valencianos quieran que sea”. Y, por desgracia, hace ahora nueve años ya lo vimos…