VALÈNCIA. El Valencia CF tendrá que tomar una decisión con uno de los jugadores que más ha mejorado desde la llegada de Bordalás, Mouctar Diakhaby, quién termina contrato al finalizar la temporada 2023 y este verano será clave en su continuidad, o no, en el conjunto de Mestalla.
La salida de Diakhaby, que se presuponía el pasado verano, no se llegó a materializar a pesar de los intentos del Valencia CF moviendo el mercado francés e inglés para tratar de sacar al central y su escenario ha cambiado con la llegada del técnico alicantino.
Con las renovaciones encima de la mesa de los tres canteranos, Gayà, Carlos Soler y Hugo Guillamón, hay situaciones contractuales que quedan en un segundo plano pero que el club debe abordar y, entre ellas, la del central francés.
La buena temporada de Diakhaby, que ha completado partidos muy buenos desde la lesión de Gabriel Paulista, está convenciendo y hay que escoger uno de los dos caminos este verano, o se amplía el contrato del ex del Lyon o se vende al terminar la temporada.
Bordalás y Diakhaby protagonizaron una de las escenas recordadas tras el pase a la final de La Cartuja, con el técnico esperándolo en unas escaleras al grito de "Diakhaaaaa", que representaba la confianza y la alegría de Bordalás con el central francés tras fundirse en un fuerte abrazo.
Diakhaby, entre lesiones y sanciones de los compañeros, se ha hecho un hueco en el once inicial y suma ya casi 1.900 minutos esta campaña, dónde ha jugado 21 de los 27 encuentros de LaLiga y los 7 partidos de la Copa del Rey, siendo uno de los más utilizados por José Bordalás.
Su coste dentro de la plantilla del Valencia CF ronda los 6 millones de euros, 3 de amortización más el sueldo bruto, y hay que tener en cuenta que el Olympique de Lyon se llevaría el 15% de la plusvalía de una futura venta del central francés, por el que se pagó quince millones de euros.