Dos apuestas ambiciosas que no están dando la talla

VALENCIA. Dos apuestas ambiciosas que no están dando la talla. Así se puede definir el 'fiasco' que está suponiendo la temporada para las aficiones del Valencia CF y Levante UD. Ambos clubes con una gran diferencia de objetivos deportivos y presupuestos económicos, han realizado un esfuerzo este verano con el fin de potenciar sus proyectos sobre el terreno de juego sin éxito.

Pese a la superioridad del Valencia CF a la hora de poder invertir en fichajes dados su masas social y afluencia al estadio así como la capacidad financiera que da jugar en competición europea, el Levante UD también ha dado un giro en cuanto a su flexibilidad económica y esta campaña sí que ha realizado desembolsos importantes. 

El club presidido por Layhoon se ha gastado este verano alrededor de ochenta millones de euros en fichajes como Mathew Ryan Joao Cancelo, Abdennour, Aderllan Santos y Santi Mina sin contar las grandes cantidades que tenías apalabradas de la temporada anterior en las incorporaciones de Rodrigo, André Gomes, Negredo o Yoel Rodríguez.

En este sentido, la entidad blanquinegra también ha tomado la determinación de reestructurar su parcela deportiva con la integración en el organigrama de Suso García Pitarch como director deportivo y Vicente Rodríguez y Pedro Gómez Carmona como nuevos miembros de la secretaría técnica. 

La declaración de intenciones de Peter Lim de desarrollar un equipo capaz de competir al máximo en las tres competiciones no ha estado a la altura de las expectativas. Ha sido eliminado de la Copa del Rey, de la Liga de Campeones y está muy lejos de su objetivo de inicio de temporada que era estar entre los cuatro primeros de la clasificación. Por ello, el equipo blanquinegro decidió prescindir de los servicios de su técnico Nuno Espírito Santo y nombrar a Gary Neville el pasado mes de diciembre e incluso se ha visto obligado a reforzar su plantilla en el mercado de invierno con las llegadas de Denis Cheryshev y Guilherme Siqueira en calidad de cedidos.

A día de hoy, los valencianistas se agarran a una Europa League en la que ya van por detrás en la eliminatoria ante el Athletic y a encadenar una gran racha de victorias en este tramo final que les permita acabar entre los siete primeros de la clasifición. Dos retos que se antojan complicados vistas las sensaciones desprendidas por el club de Mestalla este curso.

El Levante UD por su parte, también optó por 'tirar de chequera' durante estos dos mercado de fichajes. En verano, el director deportivo Manolo Salvador, incorporó a Deyverson por 1,8 millones de euros y pagó otro por Trujillo y también tuvo que efectuar un pago al Real Valladolid para hacerse con los servicios de Diego Mariño.

En cambio, Feddal, Verza, y Rubén llegaron con la carta de libertad y Ghilas y Jefferson Lerma en calidad de cedido. En relación al préstamo del colombiano, el club de Orriols se guardó una opción de compra del centrocampista a cambio de 900.000 euros.

Sin embargo, los resultados empezaron a saltar las alarmas del Levante UD en las primeras jornadas en las que se introdujo en los puestos de descenso. Los granotas muy grises en sus encuentros y como 'farolillo rojo' de la competición, tomó la decisión de destituir a Lucas Alcaraz tras caer por 0-4 ante la Real Sociedad y contratar a Rubi que se estrenó precisamente en Mestalla contra el Valencia CF donde cayó por 3-0.

Esta mala dinámica ha propiciado que la cúpula levantinista haya aumentado su apuesta en el mercado de invierno para conseguir la meta de la salvación que actualmente está a seis puntos. El Levante UD ha realizado el fichaje más caro de su historia, Mauricio Cuero, por el que ha puesto encima de la mesa 3,2 millones por su fichaje. De momento, el rápido extremo no se ha ganado un sitio en los esquemas de Rubi. Además de Cuero, la dirección deportiva granota ha reforzado su plantilla con las cesiones de Rossi y Orban que tienen una ficha elevada y Medjani y Verdú también han desembarcado en Orriols con la carta de libertad.

Aún así, el Levante UD sigue sin dar muestras suficientes para enlazar una buena racha de triunfos para conseguir abandonar la zona de descenso y el derbi ante el Valencia CF ha sido catalogada por los granotas como una auténtica 'final' para agarrarse a la Primera División.