VALÈNCIA. Pepelu no va a ser jugador del Levante. Una temporada más. Sus aspiraciones, lo que le ofrece Paco López en la primera plantilla y el mercado granota de este verano así lo vuelven a querer. Tras pasar por el campeonato portugués, donde ha dejado tal poso que incluso varios conjuntos de la Primeira Liga han insistido por él estos meses -el Vitoria Guimaraes, donde militó esta pasada temporada, apostó fuerte por su traspaso-, el canterano irá a Francia para seguir su aventura. La pasada temporada disputó 33 partidos, la gran mayoría como titular en una medular donde se hizo amo y señor.
Su curso no ha pasado desapercibido y el de Denia ha visto pasar por su buzón diversas propuestas, algunas descartadas, como de Segunda División, donde ha rechazado jugar. El Zaragoza tocó a su puerta, pero su intención, además de volver a completar una pretemporada con el Levante y tratar de hacerse un hueco en el círculo central de Orriols, siempre ha sido la de acumular minutos en la máxima competición, en la élite. Si el verano pasado supo de boca de Paco López que no contaba con sus servicios -Radoja, Malsa y Vukcevic obstruían el hueco del valenciano en plantilla-, esta vez ha sido el propio Pepelu quien ha cogido la sartén por el mango para escuchar las ofertas que le han llegado.
La intención del club ha sido en todo momento la de no deshacerse completamente de él. Quico Catalán quiere tener cierto control sobre una de las perlas de Buñol que, 'por h o por b', no ha logrado hacerse un hueco en el primer equipo. Tanto es cierto ese plan de no hacer al centrocampista desvincularse por completo que durante la pasada campaña se le renovó contrato de manera unilateral hasta 2022 mientras jugaba en el país vecino.
El deseo de la dirección deportiva en la presente ventana de traspasos ha pasado por sacar a 'pesos pesados' de la plantilla -sobre todo en cuanto a fichas- para tratar de cuadrar ese necesitado Fair Play Financiero -siempre antes del salvavidas de La Liga que finalmente ha llegado a los clubes de la LFP-. Y en ese acometido, Vukcevic ha sido -y es- un futbolista en el mercado. Las lesiones del montenegrino le han lastrado mucho en sus tres temporadas en el Ciutat de València, especialmente en esta última en cuyo final estuvo fuera de combate por la citalgia que incluso en la actual pretemporada le ha dado problemas. El problema es que escasean las ofertas por el balcánico y por Pepelu, sin embargo, han abundado por sus condiciones.
El 'caso Pepelu' es uno de esos que han llegado a enervar a una parroquia granota que quiere ver a los productos de Buñol triunfar de azul y grana. Y ha sido interminable mientras el técnico de Silla, hastab la fecha, no lo ha visto para ser pieza importante o de rotación en las tres temporadas en las que ha terminado saliendo para buscar minutos. En el entorno del futbolista están convencidos que, de jugar en el Ciutat, finalmente hubiera encontrado el sitio que necesitan él y el club. Y el caso más ilustrativo es el de la temporada pasada, con el cúmulo de lesiones sobre todo en la medular. El dienense es quizá el caso más flagrante por sus condiciones, pero hay otros que ya tuvieron que labrarse con sudor y lágrimas su hueco en Orriols. El ejemplo más claro de la actual plantilla es Roger, que pasó por Valladolid y Zaragoza antes de explotar definitivamente en su casa, en Segunda División, para refrendar un año después sus condiciones de delantero de Primera.