VALÈNCIA. El presidente del Comité Médico de la UEFA, Tim Meyer, ha reconocido que finalizar la Liga de Campeones y la Liga de Europa en medio del brote de coronavirus será un desafío mucho mayor que el reinicio de las ligas nacionales.
"Definitivamente es más complicado, aunque solo por las actuales restricciones de viaje. Es posible que necesites permisos especiales. Hay que tener en cuenta distintos escenarios sanitarios y legales. Los niveles de dificultad serían significativamente más altos en algunos lugares. La ventaja es que el aplazamiento de los partidos permite una planificación más calmada. Podemos esperar a ver cómo se desarrollan las cosas", explicó Meyer en declaraciones a dpa.
La UEFA planea reanudar las competiciones europeas después de la finalización de las ligas nacionales, posiblemente a finales de agosto. La Champions y la Liga Europa están paralizadas en las eliminatorias de octavos de final y hay varios escenarios para completarlas, incluidos torneos rápidos en una sede única.
Meyer también es el principal funcionario médico de la Federación Alemana de Fútbol (DFB) y dirige un grupo de trabajo interno que ha elaborado un manual detallado sobre cómo la Bundesliga podría reiniciarse el próximo mes a puerta cerrada, a la espera del permiso de las autoridades políticas y médicas.
"La situación no es igual en todos los países. En Alemania la situación es relativamente favorable en este momento en comparación con Inglaterra. Actualmente tenemos un número decreciente de personas infectadas y tenemos una inmensa capacidad de realizar pruebas en el país, muy distinto a lo que ocurre en otros países ", dijo Meyer.
El médico admitió la presión pública mientras elaboraba el manual con su equipo y está convencido de que "puede funcionar" si todas las partes involucradas son extremadamente disciplinadas. Además, explicó que una de las preguntas más difíciles es la cantidad de pruebas necesarias y qué hacer cuando alguien involucrado contrae el coronavirus.
Meyer instó a los equipos a disputar un partido de prueba antes de que se reanude la temporada para ver si se cumplen todos los estándares de higiene y seguridad. Los partidos se celebrarían sin restricciones y se han descartado opciones como jugar con mascarilla. "La premisa es que todo siga igual sobre el campo", finalizó.