VALÈNCIA. El Levante, con quince empates, es el segundo equipo de la categoría que más igualadas lleva y esta pérdida de puntos, tanto en casa como fuera, le resta posibilidades de lograr el ascenso directo a Primera División.
Sólo el Huesca, con dieciséis y un partido menos por jugar, lleva más empates que el Levante y de todos los rivales del equipo valenciano por ascender el único que presenta unos registros similares es la UD Las Palmas, que hasta ahora ha sumado catorce igualadas.
El Levante ha empatado en el Ciutat de València seis partidos. Cuatro de éstos fueron sin goles y ante la UD Las Palmas el encuentro acabó con 1-1 después de haberse adelantado el equipo valenciano en el marcador, tal y como ocurrió ante el Real Zaragoza este pasado viernes.
Como visitante, el Levante ha logrado hasta nueve empates, cinco de ellos sin goles. En Leganés, Lugo y Oviedo el Levante sumó un punto después de ir por detrás en el marcador, mientras que sólo en Gijón se puso por delante y acabó cediendo el empate.
El propio Javier Calleja admitió tras el empate sumado ante el Real Zaragoza (1-1) en el Ciutat de València que su equipo no es capaz de gestionar las ventajas en los partidos, aunque espera que sirva “de lección” para las ocho jornadas que quedan hasta el final de curso.
“Necesitamos ser más valientes. No podemos especular, confundimos el control del partido con la especulación. Tenemos que ser más agresivos. Si no sabemos jugar con la presión, peligro. Hay tiempo para cambiarlo y ser críticos de puertas hacia adentro. Vamos a pelear por cambiar la sensación del equipo”, comentó el entrenador del Levante.
Con ocho partidos por delante, cuatro de ellos fuera y otros tantos en casa, el Levante no tiene mucho más margen para empatar si quiere acabar la Liga entre los dos primeros y evitar la promoción de ascenso a Primera División.