VALÈNCIA. El Levante perdió este jueves una oportunidad de oro para meterle un mordisco espectacular a la clasificación. En caso de haber vencido ante la Ponferradina, los de Calleja se hubiesen aupado a la tercera posición, con los mismos puntos que el segundo y el cuarto -Burgos y Alavés- y a solo uno del líder, Las Palmas, que encabeza la tabla con 35. Y es que, si los resultados de la pasada jornada con victoria granota frente al Málaga no ayudaron para el avance levantinista en la categoría, en esta, sin triunfo, sí lo han hecho. Precisamente Las Palmas empató en Oviedo, el Alavés sucumbió en Tenerife y el Burgos, poco antes de la cita en Orriols, perdió frente al Eibar. La nota negativa, en este caso, la victoria armera.
El caso es que, con el empate a cero cosechado ante uno de los rivales incrustados en la zona de descenso a la Primera RFEF, el Levante pierde la gran oportunidad, pero no fuelle. Sigue en la estela de sus rivales, a pesar de no conseguir redondear seguramente el que fuera el partido más importante de la temporada en términos de ascenso en la tabla. Los levantinistas se han quedado igual que antes de iniciar la jornada: a tres puntos del liderato y a dos de las plazas de ascenso directo. Lo que prima entonces para el elenco blaugrana es ahora el choque de Mendizorroza del próximo lunes. Aunque todavía queda mucha campaña, es una final anticipada entre dos equipos llamados a regresar el próximo curso a la élite.
De triunfar, los hombres de Calleja no solo volverían a apretar las cosas en la parte noble de la clasificación, sino que además dejarían un punto atrás al propio Alavés. Las Palmas recibe al Albacete el domingo por la noche, así que el Levante volverá a saltar al césped a sabiendas de los marcadores del resto de sus oponentes por el ascenso directo, igual que ocurriera este jueves. La derrota, no obstante, estancaría a los granotas: el Granada de Paco López podría dar caza si vence al Burgos, lo que en su caso relajaría el frenazo por la derrota de los burgaleses.
La batalla está muy estrecha en una Segunda División que da la razón a Calleja cuando habla de la igualdad del campeonato. "Estamos en una buena posición, es un punto más cerca del ascenso directo y no hay que ponerse nerviosos", dijo el entrenador tras cuajar el nuevo empate, ante la Ponfe, que además acredita una falta de gol por hoy alarmante en su equipo.