El peor partido en defensa de la historia taronja en Eurocup

VALÈNCIA. La derrota del Valencia Basket contra el Zenit de San Petersburgo en Eurocup tiene importancia tanto en la forma como en el fondo. Aunque clasificatoriamente no supuso más que ceder el liderato a los rusos para caer a la tercera plaza empatando también con el ASVEL Villeurbanne, la noche de ayer acabaría siendo histórica por completar el peor partido en defensa del Valencia Basket en la Eurocup. 

El Zenit de San Petersburgo se convirtió el primer equipo en anotarle 104 puntos a los taronja en un partido de competición continental. El rival que más se había acercado fue el Khimki convirtiendo 98 puntos en marzo de 2017. De los 95 equipos a los que se ha enfrentado el Valencia Basket en Eurocup ninguno había conseguido alcanzar esa cifra hasta anoche.  Un dato que ofrecía el periodista especialista en baloncesto europeo Javier Gancedo en su cuenta personal de Twitter.

El equipo de Jaume Ponsarnau encajó 19, 30, 25 y 30 puntos por cuarto. En dos periodos recibir hasta una treintena de puntos deja en clara evidencia la falta de lectura, intensidad y concentración en defensa de los jugadores del Valencia Basket en diversos tramos del partido. 

Eso sin desmerecer la exhibición de, concretamente, tres jugadores del Zenit de San Petersburgo que ofrecieron unos porcentajes espectaculares (sin demasiada oposición). El pívot Jalen Reynolds, exjugador del Barça, anotó 21 puntos con 10/10 de acierto en tiros de dos. El base y estrella ex NBA Brandon Jennings completó un doble-doble con 11 puntos y 12 asistencias. Y el también ex NBA, el alero Sergey Karasev alcanzó los 26 puntos con un 6/8 en triples. Pese a que ellos fueron los más destacados, hasta tres jugadores más sobrepasaron la barrera de los 10 puntos. 

El Valencia Basket comenzó bien el partido. Circulación de balón, tiros bien ejecutados con acierto y gran trabajo defensivo llegando a las ayudas y protegiendo el rebote en el primer cuarto. A partir de ahí se gestó la hecatombe. En el segundo periodo, el conjunto taronja se fue haciendo pequeño en ambos lados de la cancha y el Zenit no tuvo piedad. El parcial de 30 a 14 fue letal. Tuvo el conjunto de Ponsarnau 20 minutos para volver a andar lo desandado pero fue incapaz. El esfuerzo del tercer cuarto fue insuficiente, pues en el último periodo se volvieron a encajar 30 puntos. Inadmisible. 

El juego interior del Valencia Basket se puso de nuevo en evidencia ante un rival grande. Lo mismo que ocurrió contra el Barça pero con la excepción de que Mike Tobey apareció en el último cuarto para tratar de empujar al equipo, cuando anotó 10 puntos frente a los 6 que anotó en los tres anteriores. Insuficiente. Bojan Dubljevic volvió a estar otro día importante sin aparecer y con carencias físicas evidentes. Will Thomas se vio superado por una defensa muy medida y estudiada de los jugadores rusos. Louis Labeyrie aportando solo por momentos. 

Por fortuna, Matt Thomas sacó a relucir su poderío ofensivo con 22 puntos, junto a un Sam Van Rossom que recuperó su acierto con 12 puntos y repartió 6 asistencias. El 'invitado' sorpresa de la noche fue Sergi García, que tuvo minutos en detrimento de Guillem Vives, que solo estuvo cinco. Ponsarnau probó a los tres bases y acabó sentando al menos entonado. El tiempo de Sergi en la pista dejó grandes sensaciones con 8 puntos y 4 asistencias en 14 minutos. 

Pero la derrota histórica del Valencia Basket va mucho más allá. En este inicio de temporada, el balance es de 2-3 en Liga Endesa y 3-1 en la Eurocup. Las cuatro derrotas sufridas han sido equipos que, a priori, son rivales directos del equipo taronja en ambas competiciones. Unicaja, Real Madrid y Barça para estar entre los cuatro primeros tanto para la Copa del Rey como para el playoff, con el añadido de que el Valencia Basket se juega contra Unicaja la plaza para la Euroliga. El Zenit de San Petersburgo venía a ser el 'coco' del grupo contra el que luchar por el liderato del grupo de la Eurocup y se ha demostrado tampoco estar a la altura. 

Los de Jaume Ponsarnau dan pasos de tortuga hacia el nivel de esos equipos y hoy probablemente esté menos lejos que ayer. En cada partido se van puliendo aspectos pero se descuidan otros. Queda mucho trabajo por delante para ver a la mejor versión de este Valencia Basket.