Hoy es 14 de octubre
VALÈNCIA. Julián Calero puede respirar tranquilo, si es que teme una salida de Carlos Álvarez en los últimos días de mercado. El técnico no cerró la puerta a la marcha de ninguno de sus pupilos. "No pongo la mano en el fuego por nada, ahora mismo", dijo el entrenador del Levante tras el empate ante el Cádiz del sábado y después del partidazo del joven sevillano, que acapara alguna mirada en el mercado nacional... e internacional. Según ha destapado este lunes SER Deportivos, el fútbol árabe ha tanteado el fichaje de Carlitos y ha llegado a tocar a su puerta con 5 millones de euros para el club de Orriols, que necesita las ventas como el comer con el objeto de inscribir a los cinco jugadores que restar por ser registrados.
No obstante, el Sevilla mantiene un 40% de los derechos económicos del jugador, tal y como confirman a este medio fuentes de Nervión. Es casi la mitad de un montante económico que llegara a las arcas del Ciutat en un futuro y eso obliga a buscar una cantidad mayor por el '24' granota. Esos 5 millones no solucionarían la enrevesada papeleta que encuentra Felipe Miñambres en la última semana de mercado, pues necesita ejecutar una de las ventas primordiales, especialmente la de Pablo Martínez -la que más se ha cocinado, sin traca final hasta el momento- para poder incribir a la totalidad de la plantilla.
Solo una oferta mareante por Carlos Álvarez podría hacer al Levante aceptar una propuesta por el centrocampista andaluz. Habría de ser una oferta que solventara parte de los graves problemas económicos que aprietan el gaznate de la entidad. Un pellizco que se considerara 'irresponsable' de rechazar tal y como está la caja fuerte del Ciutat hoy. De lo contrario, Carlos seguirá jugando esta campaña en el Levante porque, además, se le considera una pieza cuyo provecho económico se puede exprimir en temporadas venideras.