El Valencia 2021, de la amenaza del descenso al sueño europeo

VALÈNCIA. El Valencia, que abrió el 2021 que ahora acaba demasiado cerca de la zona baja de la tabla, lo cierra en esta nueva temporada, con José Bordalás en su banquillo desde este verano, tras haber alimentado en las últimas jornadas el sueño de volver a clasificarse para competiciones europeas.

El equipo valenciano arrancó el año natural con un empate a uno en Mestalla ante el Cádiz que estuvo cerca de costarle el puesto al técnico Javi Gracia y que le dejó en la décimo sexta posición de la clasificación, sólo dos puestos por encima del descenso pero empatado a puntos que el antepenúltimo, el primero en puestos para bajar a Segunda.

Aún descendió una posición más en la siguiente jornada y nunca llegó a despejar ese peligro, hasta el punto de que a falta de cuatro jornadas, cuando estaba a seis puntos del descenso, el club destituyó a Gracia y recurrió, nuevamente a Voro González para acabar la temporada.

Por el camino, el equipo había sido eliminado en octavos de la Copa del Rey en el campo del Sevilla, en una campaña en la que, como en la actual, el equipo no competía en Europa.

Un triunfo ante el Valladolid, rival directo, en el estreno de Voro permitió a la entidad respirar tranquila y el equipo acabó con un colchón de nueve puntos sobre la zona de descenso.

Acabada la temporada, el club abrió un proceso de búsqueda de entrenador que finalizó con la contratación de Bordalás a finales del mes de mayo con un contrato de dos campañas de duración y una tercera opcional.

El club de Mestalla, con el técnico implicado en las operaciones, incorporó a seis jugadores, cuatro de ellos en calidad de cedidos con opción de compra (Hélder Costa, Hugo Duro, Giorgi Mamardashvili y Omar Alderete) y dos como nuevos jugadores en propiedad (Dimitri Foulquier y Marcos André).

El traspaso del delantero brasileño procedente del Valladolid puso fin a setecientos días sin que el club hubiera incorporado en propiedad a ningún futbolista, lo que se convirtió en un reflejo de sus problemas económicos del club.

Aunque no hubo ingresos directos por traspaso, sí que se produjeron salidas. Dejaron la plantilla Kang In Lee, una despedida tras haberse formado en la cantera del club durante diez años, Rubén Sobrino (por el que se guardó posibles ingresos de una futura operación), Jorge Sáenz (cedido), Kevin Gameiro, Eliaquim Mangala, Christian Oliva, Francisco Reis Ferro y Patrick Cutrone, estos tres últimos llegados como cedido en la segunda mitad del pasado ejercicio.

Con una plantilla con esos movimientos y bastante reforzada por jugadores de la cantera, el equipo arrancó LaLiga con tres triunfos y un empate pero, golpeado por las lesiones, perdió el paso, estuvo siete jornadas seguidas sin ganar y parecía abocado de nuevo a sufrir en la parte baja de la tabla.

Sin embargo, una buena evolución defensiva, con un cambio de sistema incluido, aumentó la solidez del equipo y esa mejoría se tradujo en un balance de quince puntos de veintiuno posibles, que le han permitido “poder pensar en otras cosas” como explicó Bordalás.

Así, desde la derrota por 3-1 en el campo del Real Betis de hace dos meses (27 de octubre), el conjunto valenciano no conoce la derrota.