El Valencia CF ‘gira’ la manta: pierde solidez defensiva y gana en pegada

VALENCIA. Rafa Benítez acuñó la famosa explicación ‘de la manta’ cuando se le cuestionaba sobre la falta de llegada a la portería contraria cuando reforzaba la parcela defensiva del equipo. “Tenemos una manta corta, si queremos taparnos la cabeza los pies se nos quedan fuera”, explicaba el preparador madrileño.

Este aspecto lo ha heredado también el Valencia CF de Marcelino García Toral. En el tramo inicial de la temporada el equipo mostró una sólidez defensiva inusual, tanto en pretemporada como en las primeras jornadas ligueras mientras que el foco se centraba en la ineficacia de los delanteros y su falta de gol.

Pero en estas últimas jornadas el club de Mestalla ha ‘girado’ esa manta y ha pasado a ser un equipo temible en la parte delantera mientras que ha perdido la eficacia ganada en defensa del inicio, convirtiéndose en un equipo mucho más vulnerable. Y es que en los dos últimos encuentros el Valencia CF ha encajado más goles que en los cinco anteriores.

El equipo de Marcelino visitó San Sebastián con tan solo tres goles en contra y con la parcela ofensiva en plena ebullición tras la goleada al Málaga por cinco a cero. En Anoeta el combinado valencianista recibió dos goles, los mismos que ante el Athletic en Mestalla, siendo los primeros goles recibido por los blanquinegros en su estadio, que se había mantenido invicto en sus tres primeros encuentros.

Pese al aumento de goles en contra, por su parte, el Valencia sigue manteniéndose invicto en la competición gracias al gran paso al frente que han dado sus hombres de ataque, sobre todo Rodrigo Moreno y Simone Zaza. Los dos integrantes del ataque valencianista acumulan tres jornadas seguidas marcando y en las tres últimas jornadas ambos han marcado ocho tantos, más que todo el equipo en las cuatro anteriores.

Marcelino se mostró muy confiado en sus delanteros tras el encuentro frente al Levante y dejó claro que los goles iban a llegar. El asturiano no se equivocaba y los goles han llegado a Mestalla, eso sí, a costa de mostrar algo más de debilidad defensiva. La manta sigue siendo corta y todavía no cubre todo el cuerpo.