VALÈNCIA. (EFE).- El Valencia cuenta de aquí a final de año con un calendario repleto de partidos ante rivales directos por la permanencia, cuatro encuentros ligueros que se sucederán en tres semanas frenéticas que empiezan este mismo miércoles con la segunda ronda de Copa ante el Ejea.
El equipo de Rubén Baraja es ahora mismo uno de los tres últimos de la clasificación tras la derrota en Son Moix pese a haberse adelantado en el marcador, un encuentro que hunde todavía más al conjunto valenciano.
Con dos partidos menos por la trágica dana que ha sacudido la provincia de Valencia en este último mes, el equipo de Mestalla acumula diez puntos en sus trece partidos ligueros, dos menos que Las Palmas, con doce y que marca la décimo séptima posición, la primera a salvo de la Segunda División.
En cualquier caso, el primer partido que el Valencia debe encarar este diciembre es de Copa. Los de Baraja se enfrentarán este miércoles 4 al SD Ejea zaragozano de Segunda Federación al que llega tras ganar sólo 0-1 al Parla Escuela en la primera ronda.
"Debe ser un aviso de que si no estás a tu nivel, te pueden eliminar", dijo Baraja el pasado jueves tras ese encuentro, en el que, incidió, no tuvieron el control y dejaron "demasiado abierto el partido". Aún así, se espera que el vallisoletano vuelva a alinear en Ejea de los Caballeros a una 'unidad B' que no terminó de funcionar en Parla (Madrid).
Tras ello, el Valencia recibirá el sábado 7 al Rayo Vallecano, un encuentro que, de alguna manera, le puede servir no solo para sumar sino para introducir en esa pelea en la zona baja al equipo vallecano, que cuenta con dieciséis puntos.
Seis días después, el Valencia visitará el José Zorrilla vallisoletano y tendrá que intentar mostrar otra cara distinta a la que ha exhibido como visitante esta temporada, pues no ha conseguido ni una sola victoria fuera de Mestalla y lo máximo que ha logrado han sido dos empates ante Leganés y Getafe.
Tras esa visita, el equipo de Mestalla volverá a viajar, en este caso a Cornellà (Barcelona), para recuperar el encuentro aplazado por la dana y en el que se medirá a otro rival directo por la permanencia como es el Espanyol, que en las últimas jornadas no ha encontrado el equilibrio entre ataque y defensa y acumula cuatro derrotas seguidas.
Así, el Valencia cerrará el año como local y lo hará frente al Deportivo Alavés, que ya le ganó en pretemporada (0-1) en el Antonio Puchades y que también doblegó al Valencia en los dos partidos disputados en Liga la pasada campaña.
En las últimas semanas, el Alavés apenas ha cosechado tres puntos de los últimos quince, con cuatro derrotas en cinco duelos, por lo que ese encuentro que terminará con el año futbolístico del Valencia puede ser otro ante un rival directo.