El Valencia, de nuevo, juez en el objetivo del Villarreal

VALENCIA. El Valencia se mide este domingo al Villarreal pudiendo ser, como ya sucediera en el año 2012, juez en la consecución del objetivo del conjunto amarillo, que llegará a Mestalla con la necesidad de puntuar para no ver como sus rivales en la lucha por la cuarta plaza se le acercan de manera peligrosa.

Y es que el combinado que dirige Marcelino llega a Valencia después de sumar un punto de los últimos nueve que han dilapidado la gran ventaja que tenía con respecto a sus perseguidores en la batalla por la cuarta plaza, con lo que necesita puntuar en Mestalla para intentar llegar con calma a las dos últimas jornadas y poder centrarse en su eliminatoria con el Liverpool.

El Valencia, mientras tanto, ha dejado escapar cualquier opción de poder alcanzar al Sevilla en la séptima plaza tras el empate ante el Getafe. El conjunto de Ayestarán se encuentra a ocho puntos de los de Emery con únicamente nueve por jugar, con lo que lo único que tendrá en juego ante los amarillos será salvar un poco la honra después de una temporada lamentable.

Con objetivos distintos pero la situación recuerda a la que se vivió en 2012. En aquel momento el Villarreal llegaba a Mestalla en la jornada 37, con un Valencia que prácticamente ya era tercero y con un Villarreal que se estaba jugando su futuro en primera división. El encuentro transcurrió con empate a cero, un empate que servía a los dos tras el pinchazo del Málaga.

Cuando todo parecía adecuado para ese 0-0, un balón colgado desde el centro del campo, sin aparente peligro acabó en los pies de Jonas que lo envió a la red. El Valencia sumó los tres puntos, aseguró la tercera plaza y condenó al Villarreal, que terminaría descendiendo a segunda división en la última jornada por un punto, el que tenía en su casillero con el empate en Mestalla.

Esta actuación encendió mucho los ánimos en la directiva amarilla, que abandonó el palco de Mestalla a golpes con el mobiliario y que se vio reflejada en el verano, cuando el Valencia intentó fichar a Bruno, algo a lo que Fernando Roig se negó en rotundo, pese al interés del jugador en recalar en la entidad valencianista.

Ahora, cuatro años después, el Villarreal vuelve a jugarse gran parte de su objetivo en Mestalla puesto que una victoria del Celta en Balaidos y una victoria del Valencia dejaría en un punto la distancia de los amarillos con su perseguidor, con lo que pondría en serio riesgo su posición liguera.

El Valencia, por su parte, es consciente de que pese a que clasificatoriamente hay poco en juego, hay mucho por demostrar sobre el césped ya que la afición no le perdonará no dar la cara ante el combinado amarillo.