VALÈNCIA. El Valencia no encuentra una solución al central. La dirección deportiva lleva casi dos semanas peinando el mercado español en busca de detectar una oportunidad que pueda suplir la baja de Ezequiel Garay. Celades quiere firmar un jugador con celeridad ya que considera que con tres efectivos -Paulista, Diakhaby y Mangala- el riesgo para afrontar la segunda parte de la temporada es bastante alto.
El Valencia se está chocando con las dificultades que entraña firmar un jugador fuera de una ventana de fichajes. César Sánchez lleva trabajando varios días para tantear opciones, pero la respuesta de los clubes es la de una posición dura debido a las circunstancias que rodean desprenderse de algún futbolista en estos momentos.
El primer movimiento fue recuperar a Jorge Saénz. El canario no juega en el Celta y lleva nueve partidos quedándose fuera de las lista de convocados. Sin embargo, el cuadro celeste pidió cerca de 3 millones de euros por romper la cesión. Miñambres explicó que no iban a facilitar su salida ya que de salir Jorge Saénz, se quedarían con tres centrales.
El Valencia no quiere invertir una gran cantidad de dinero para traer un nuevo futbolista. Ahí reside el problema. Las puertas que ha tocado César Sánchez no han dado resultado y la posibilidad de que no venga nadie empieza a ganar enteros con fuerza. Siovas, Calero, Roncaglia, Sidnei o Feddal entre otros, han aparecido encima de la mesa pero el Valencia no se ha lanzado con decisión a por ninguno.
Todo esta situación va unida al estado físico de Mangala, que apenas ha competido en los dos últimos años y su puesto a punto se antoja lejana para Celades, que apenas le ha dado oportunidades desde su llegada. El francés ha participado tres partidos enteros y un par de minutos en Amsterdam. De hecho, sorprendió su ausencia en León en la Copa del Rey. No obstante, el técnico catalán tiene pocas opciones para el duelo de San Siro ya que Gabriel Paulista está sancionado.