VALÈNCIA. Más tiempo. Eso es lo que ha pedido el Valencia CF a Deloitte para tomar la decisión sobre la venta del suelo terciario de más de 41.000 metros cuadrados incluido en el proyecto que la gestora de cooperativas ADU Mediterráneo promueve en los terrenos donde actualmente se ubica el viejo Mestalla. Un suelo que pertenece al club que preside Peter Lim y cuya venta condiciona el desarrollo de la operación inmobiliaria. Aunque no ha trascendido el número de propuestas, según ha podido saber este diario, serían entre dos y tres los interesados en hacerse con la parcela para uso comercial.
Era esta semana cuando estaba previsto que se adjudicaran los terrenos a algunos de los operadores que el pasado viernes 25 de octubre presentaban oferta ante la consultora. La idea era que, tras unos días para tomar la decisión, fuese esta semana cuando se conociera el nombre del comprador, pero finalmente la decisión se retrasa hasta finales de noviembre. Una nueva fecha que se suma a otros aplazamientos que esta fase de la operación ha sufrido.
En un principio era el 22 de octubre cuando los operadores debían presentar sus propuestas para conocer la decisión el 25. Más tarde se acordó que ese día se recibieran las ofertas para dar a conocer el veredicto esta misma semana. De hecho, fuentes de ADU daban por seguro que entre ayer martes y este miércoles se conocería al comprador de ese suelo para seguir encarando el tramo final de la operación.
Esta demora se debe, según fuentes consultadas por Valencia Plaza, a una cuestión relacionada con el contenido de los proyectos, ya que el precio de las ofertas es muy similar y no presenta ningún variación significativa que decante la balanza hacía una de ellas. Por tanto, lo que se pretende es que los operadores concreten aun más su propuesta y detallen algunos aspectos para dirimir cuál es la más adecuada y la que más se ajusta al proyecto que se quiere levantar en el entorno del Mestalla. Para ello, la próxima semana se mantendrán reuniones con los ofertantes para tomar la decisión final sobre el 20 de noviembre. Desde el primer momento se ha buscado que el adjudicatario de esos terrenos aporte "un valor añadido" no solo al proyecto, sino también al barrio para conseguir hacerlo más atractivo.
La venta de este suelo es imprescindible para que la gestora de cooperativas pueda dar los siguientes pasos: hacer frente a los más de 100 millones de euros que debe pagar al Valencia CF y, a su vez, rebajar el precio de las viviendas. Pese a tener que esperar 20 días, desde ADU explican que la similitud de precios de las ofertas les permite estimar el precio final de los inmuebles por metro cuadrado y, de este modo, calmar la incertidumbre que había entre los futuros compradores de los inmuebles.
Hasta el momento, la cantidad aportada para la preinscripción era de 3.500 euros, reembolsable en caso de darse de baja a excepción de 50 euros por gastos de gestión, pero para seguir adelante y formar parte de la cooperativa la cifra se eleva a los 30.000 euros. Desde ADU aseguran que "prácticamente cuentan con el 100%" de los socios necesarios, una cifra superior al 70% exigido para firmar con el club y y tener acceso a la financiación de una entidad bancaria.
El calendario corre y aunque todavía hay tiempo, era diciembre el mes fijado para tener cerrada toda la operación que contempla la demolición del antiguo estadio y la construcción de las viviendas y una zona comercial, una actuación cifrada en 400 millones.
"La idea es en diciembre tener toda la operación cerrada", aseguraron desde ADU a este diario. Según explicaron los responsables del proyecto en rueda de prensa el pasado mes de abril, tras firmar con el Valencia, el club deberá entregar el estadio para iniciar los trabajos. El calendario sitúa la fecha entre julio y septiembre del año 2022 y a finales de 2025, la entrega de llaves de los inmuebles.
El conjunto de la operación inmobiliaria afecta a una superficie de 97.225 metros cuadrados, de los cuales 41.456 metros cuadrados son de suelo terciario y 55.769 metros cuadrados irán destinados a la parte residencial. Bautizado con el nombre Residencial Acequia de Mestalla, el proyecto que lleva el sello del arquitecto Ignacio Pombo, incluye cinco torres a las que podrían sumarse otras dos anexas que son de titularidad municipal. Aunque en un principio se habló de unas 485 viviendas, la cifra se ha rebajado a unos 350 inmuebles.
La promoción contará, además, con guiños al antiguo estadio manteniendo como hito de memoria el punto exacto del círculo de central de saque de Mestalla junto a diferentes zonas comunes como piscina, spa o solarium.
La ideación de Mario Valle y Antonio Verdú, como ejemplo de ideación arquitectónica, abre la fantasía urbana de imaginar Mestalla com un fenómeno que sobrepasa su propio uso: un viejo estadio como identidad colectiva de una ciudad
