VALÈNCIA. El Valencia CF ocupa la quinta posición en el límite de coste de plantilla para la temporada 2019-2020. Según cifras desveladas por la Voz de Galicia y que todavía no son oficiales, el equipo valencianista tiene un máximo de 171 millones de euros, solo superado por FC Barcelona, Real Madrid, Atlético y Sevilla FC.
El FC Barcelona lidera está clasificación con 671 millones de euros seguidor por el Real Madrid con 641 millones. El podio lo cierra el Atlético de Madrid con 349 millones de euros mientras que el Sevilla FC está ligeramente por encima del Valencia con 185 millones de euros.
En este sentido, el club de Mestalla cae una posición respecto al año pasado en favor de los de Nervión, pese a que ha dado un salto desde los 164.6 millones a los 171. Detrás del Valencia está el Villarreal con 109 millones mientras que el Levante cuenta con 57 y está en el decimotercero lugar.
Este límite de coste de plantilla es el importe máximo que cada club o SAD puede gastar en esta temporada e incluye el gasto en jugadores, primer y segundo entrenador y preparador físico del primer equipo. También incluye el gasto en filiales, cantera y otras secciones.
Los conceptos que se incluyen en el límite de coste de plantilla deportiva inscribible y no inscribible son salarios fijos y variables, seguridad social, primas colectivas, gastos de adquisición, incluidas las comisiones para agentes, y amortizaciones, que es el importe de compra de los jugadores imputado anualmente en función del número de años de contrato.
Cada club o SAD propone a LaLiga su límite de coste de la plantilla, en cumplimiento de las normas de elaboración de sus presupuestos, pero es el Órgano de Validación de LaLiga el que debe aprobarlo o no y, en su caso, rectificarlo hasta el importe que garantice la estabilidad financiera de la entidad.
La solicitud que tramita un club o SAD de su Límite de Coste de la Plantilla no siempre corresponde con su límite máximo. Pueden pedir el límite que estimen oportuno para hacer frente a su presupuesto de gastos deportivos, siempre que no supere su límite máximo, y éste puede no alcanzarse e, incluso, verse incrementado.