ALICANTE. El Elche despedirá 2021 fuera del descenso, aunque con los mismos puntos que el Alavés, antepenúltimo clasificado, tras un año en el que vivió al límite del precipicio y en el que logró una permanencia agónica y casi milagrosa en la última jornada de la pasada temporada.
El conjunto ilicitano, sin embargo, dice adiós al curso con cierto sabor agridulce, ya que se está cumpliendo el objetivo mínimo marcado, aunque en el entorno de la entidad y en la afición existe el convencimiento de que hay equipo para no pasar tantos apuros, sobre todo tras los fichajes de jugadores del prestigio como los argentinos Javier Pastore o Darío Benedetto.
El Elche ya arrancó 2021 en una grave crisis de resultados que se prolongó hasta febrero, lo que provocó el despido del técnico argentino Jorge Almirón y el regreso al banquillo de Fran Escribá, ídolo de la afición tras haber conducido al equipo en su anterior etapa a Primera y haber logrado dos permanencias consecutivas.
La llegada del valenciano fue el revulsivo que el equipo necesitaba, ya que logró reaccionar y salir del descenso logrando victorias dramáticas, una de ellas ante el Sevilla (2-1).
El conjunto ilicitano estuvo gran parte de la temporada fuera del descenso, pero encadenó varias derrotas consecutivas y malos resultados ante rivales directos, como Huesca (3-1), Valladolid (1-1) y Alavés (0-2) que le dejaron prácticamente descendido a falta de dos jornadas.
El Elche estaba obligado a sumar los seis puntos y esperar a que el Huesca flaqueara para optar a la salvación. El equipo ilicitano cumplió ante Cádiz (1-3) y Athletic (2-0), dos equipos que ya no se jugaban nada, mientras el Huesca falló, sobre todo en la última jornada ante un Valencia sin ya nada por lo que luchar (0-0).
La carambola a dos bandas dio al Elche una permanencia muy celebrada, ya que el equipo parecía sentenciado a Segunda solo dos semanas antes.
El propietario del club, Christian Bragarnik, tomó nota de lo sucedido y decidió intervenir de forma directa en la planificación deportiva para evitar apuros.
Llegaron a la entidad jugadores contrastados en Primera, como Pedro Bigas, el portero Kiko Casilla, el centrocampista Omar Mascarell o el delantero Lucas Pérez, aunque la guinda fue las incorporaciones de futbolistas de prestigio mundial como los argentinos Javier Pastore y Darío Benedetto, socio además del propietario en la empresa que adquirió el club.
El Elche, con la que se llegó a calificar la mejor plantilla de su historia, tuvo un buen inicio de competición. Sumó ante Athletic y Sevilla, perdió ante el Atlético pero ganó en Getafe. Sin embargo, el Elche no supo darle continuidad a esta buena dinámica, en parte por gravísimos errores defensivos que le costaron puntos ante Levante, Real Sociedad o Villarreal.
El triunfo ante el Celta (1-0) pareció despejar los primeros fantasmas, aunque solo fue un espejismo, porque el equipo fue a menos. Fue incapaz de ganar durante siete partidos, dejando escapar puntos ante rivales directos como Rayo (2-1), Alavés (1-0) y Mallorca (2-2), entre otros. La derrota ante el Betis (0-3), que hundió al equipo en la zona de descenso, provocó la fulminante destitución de Escribá.
Bragarnik, tras una profunda reflexión, optó finalmente por contratar a Francisco Rodríguez. La llegada del técnico almeriense tuvo efecto inmediato con un empate en Pamplona, aunque el preparador no se sentó aún en el banquillo, y la victoria ante el Cádiz, rival directo, que le dio al Elche aire y le alejó del descenso.
El equipo, sin embargo, no pudo darle continuidad a la buena dinámica fuera de casa, ya que despidió el año con dos derrotas en Valencia (2-1) y Barcelona (3-2), en partidos en los que estuvo cerca de sumar, aunque por errores arbitrales y fallos defensivos dejó escapar la oportunidad.
Solo la derrota este martes en Villarreal del Alavés, que tiene peor coeficiente general, impidió al Elche despedir 2021 en zona de descenso.
Un pequeño consuelo, aunque no suficiente para las expectativas que se habían creado con una plantilla de grandes nombres. Más allá de Mojica y Lucas Boyé, valores ya conocidos del pasado curso, en Elche aún se espera la mejor versión de Casilla, Benedetto, Pastore o Lucas Pérez, entre otros.