VALÈNCIA. El entrenador del Villarreal, Unai Emery, consideró que "es positivo el empate" a uno sumado por su equipo este domingo en el campo del Betis al término de un encuentro en el que hasta tres "lesiones han condicionado los cambios y cómo llevar el control del partido con el 0-1".
Emery admitió que, al comienzo de la segunda mitad, "su gol dejó noqueado" al Villarreal que, sin embargo, retomó "pronto el control" para "llegar a su área pero sin demasiada claridad", por lo que el partido le deja "una sensación extraña, con poca satisfacción. Cuatro empates no es algo bueno", pues los amarillos han "dejado puntos en el camino".
El preparador guipuzcoano, sin embargo, cree que su "equipo ha querido ganar", ha "estado más cerca de la victoria" que el Betis, cuyo "talento ha aparecido poco".
"Sus laterales no han sido tan efectivos. Hemos visto a un rival que ha tomado más precauciones. Era importante mantener la distancia de seis puntos con ellos. No hemos ganado, pero le sacamos seis puntos a un equipo que aspira a estar arriba", relató el técnico del conjunto amarillo.
Sin embargo, Emery señaló que "al final, ellos pedían la hora" y filosofó acerca de las cuatro igualadas consecutivas al declarar que "desprecias el empate cuando lo tienes y lo quieres cuando no lo tienes", si bien insistió en que estos resultados "penalizan porque la exigencia" lo empuja "a querer ganar siempre".
El entrenador vasco repasó la clasificación para constatar que es "complicado que los grandes fallen más. Además, el Sevilla ya está arriba con dos partidos menos", por lo que constató que "cada equipo va cogiendo su sitio" y que "los equipos que tienen que estar ahí se posicionan".