VALÈNCIA. El entrenador del Elche Fran Escribá aseguró que el triunfo ante el Levante (1-0) supone para su equipo un impulso para afrontar el exigente calendario que le resta con opciones de lograr la permanencia.
“Estoy contento, aunque esta victoria hace que nos duela un poco más todavía el empate del miércoles ante el Valladolid”, dijo el valenciano, quien indicó que el encuentro ante el Levante se desarrolló tal y como esperaba.
“Ellos tienen mucho poder ofensivo y era muy importante tener la portería a cero. Sabíamos que podíamos aprovechar alguna contra o un error”, explicó el técnico, quien lamentó que el Elche, pese a disponer de ocasiones, no supiera cerrar el marcador con un segundo gol.
Escribá calificó como “extraordinario”· el partido de su delantero Lucas Boyé, ya que recordó que al trabajo que siempre realiza le unió el gol “por lo que fue determinante”.
El entrenador del Elche valoró la capacidad de reacción del vestuario al “golpe” sufrido ante el Valladolid. “El grupo ha respondido mentalmente, porque si había un momento para caerse era éste”, apostilló.
El valenciano reiteró que el equipo ilicitano “no está muerto” y precisó que, pese a la victoria, tampoco se ha hecho nada “porque queda un mundo”.
“Creo que tendremos opciones de sumar ante el Atlético, aunque sean mucho mejores que nosotros, que lo son. Y también ante la Real”, señaló Escribá, quien admitió haber vivido los últimos minutos del partido con “psicosis” de que llegara el empate ante lo ajustado del marcador.