Felipe: "Ahora sí que hace falta una verdadera machada para meternos"

VALÈNCIA. Cariacontecido. Exhausto. Abatido. Es la imagen de Felipe Miñambres en sala de prensa después de la derrota del Levante frente al Amorebieta que frustra gran parte de las opciones granotas de perseguir las plazas de 'playoff'. "Ahora hace falta una proeza mucho mayor", ha lamentado el técnico y director deportivo astorgano. A pesar de apelar a no rendirse y a ir a Santander a "volver a encender la llama", Miñamnres ha admitido que "ahora sí que hay que hacer una verdadera machada para entrar (en los puestos de promoción de ascenso)". "Es duro para todos, veíamos que veníamos en una buena dinámica. Hemos perdido un partido que te da un bajón grande", ha asegurado.

¿Cómo está?

Mal porque hay situaciones que debemos de saber manejar después de ponernos por delante. Se pierde una nueva oportunidad. Ellos han hecho un buen partido pero hemos perdido nosotros en los detalles. Hay cosas que no debemos de hacer en determinados momentos. El gol del empate es el que, en realidad, nos ha hecho daño, pero aún así tenemos que saber que somos capaces de hacer gol en cualquier momento. Hemos tenido una de Brugui en el último momento, de hecho. La desesperación nos tiene que llegar mucho más al final, estando tranquilos somos capaces de generar mucho más. 

Ahora sí hace falta una machada

Cualquier cosa que se diga ahora... Al final, hemos perdido. Ahora sí que tienes que hacer una verdadera machada para entrar. Es cierto que ahora hay partidos contra rivales directos, pero tenemos que ganar los que tenemos que ganar. Ahora hace falta una proeza mucho mayor, pero lo que no podemos hacer es rendirnos.

Volvió a los dos delanteros

La idea era abrir el campo con dos extremos y generar uno vs uno con Fabrício y Andrés García. Su línea de cinco nos complicaba y pensábamos que por fuera íbamos a tener más oportunidades. Al final, los delanteros eran Dani Gómez y Brugui. 

"El partido estaba por fuera"

Cuando te hacen la línea de 5-4 es difícil atacar por dentro. Es lo que quieren para robarte y salir rápido. Por fuera hay más tiempo para replegar. Tampoco queríamos sacar rápido la pelota, aunque es cierto que en la primera parte hemos estado lentos. Hemos sido más ofensivos al principio, aunque luego teníamos más jugadores entre líneas para desequilibrar. Para mí el partido estaba por fuera, pero no hemos sido desequilibrar por ahí. Hemos sacado a Bouldini para ver si en algún remate éramos capaces de encontrar el gol. 

Mensaje a la afición

No podemos decir nada. Lo único que tenemos que hacer es ganar en Santander y generar otra vez la ilusión. Hoy nosotros hemos estado por debajo y nos queda esperar ganar para que la gente se vuelva a ilusionar. Es duro para todos, veíamos que veníamos en una buena dinámica. Hemos perdido un partido que te da un bajón grande.

La lesión de Algobia

Espero que se deba al cansancio. Llevaba el vendaje en el muslo, pero él dice que no ha sentido (pinchazo). Veremos.

Algo positivo

No le veo nada positivo, pero esto nos tiene que hacer aprender de errores. Y de situaciones que se vienen repitiendo del año pasado, aunque es una plantilla diferente. Hay situaciones que acabamos resolviendo mal y cometemos errores por desesperación. En general no hemos sabido manejar una situación que pensábamos que podía pasar. Estábamos avisados, pero ellos lo han manejado mejor que nosotros. 

Al Levante le cuesta cuando se encierran atrás

No nos cuesta a nosotros, les cuesta a todos. Hoy ganan otros por 1-0, con situaciones parecidas. Lo que pasa es que nosotros no hemos tenido tiempo para hacernos fuertes con ese 1-0. En estos finales de temporada los de abajo te acaban complicando y hay menos diferencia que en otros momentos de la temporada. Estoy triste por cómo ha sido todo. Hoy estoy triste, pero mañana entrenamos y tenemos que ir a Santander. Es un rival difícil, pero no nos importa el rival tanto como nosotros mismos.

La energía de los cambios

Han entrado bien. Nos ayudaron al final. Pero no hemos sabido manejar a nivel general. Han entrado con buena actitud, en el vestuario hay buen grupo. Todo el mundo tiene ganas de jugar y no todas las veces el que sale te acaba resolviendo el partido.