VALÈNCIA. La gran actuación de los valencianistas en la goleada de España ante Georgia se vio ensombrecida por la lesión del capitán del conjunto blanquinegro, José Luís Gayà.
El defensa tuvo que retirarse a los vestuarios en el minuto 74 y fue sustituido por el céltico Brais Méndez. La acción se produjo al intentar controlar en el aire un pase largo al lado de la banda. Nada más caer al suelo el futbolista de Pedreguer ya se echó la mano al gemelo con gestos de contrariedad. Acto seguido el futbolista fue atendido por las asistencias durante el parón para hidratarse. Cuando se retiraba hacia la banda se pudo leer claramente en su boca la frase: "me he roto".
El zurdo ni siquiera ocupó sitio en el banquillo y bajó directamente al vestuario para recibir tratamiento fisioterápico. El jugador padece molestias en el sóleo del gemelo y se le realizarán pruebas médicas para determinar si abandona la concentración del equipo nacional español o viaja hasta Kosovo para formar parte del grupo en este tercer y último encuentro de septiembre.
Según el parte médico emitido por la propia RFEF, el jugador del Valencia "se retiró con molestia aguda en la cara posterior de pierna izquierda. En primera exploración se sospecha que sea causado por una lesión en el soleo que parece leve. Pendiente de resonancia magnética mañana para diagnóstico definitivo".
