Hoy es 12 de octubre
MADRID. Fueron los mejores del Elche en Valladolid con diferencia: Edgar Badía con otra buena ración de paradas que evitaron que los suyos salieran goleados y Josan con un bonito tanto que por un momento hizo creer en la remontada... al entorno más que a los jugadores franjiverdes, a juzgar por lo que precisamente el meta y el extremo (reconvertido en carrilero) manifestaron tras el choque.
Sobre el verde, en caliente, Badía se confesaba "hundido" en los micrófonos de DAZN, llegando incluso a restarse méritos por haber encajado dos goles: "Me da igual que yo pare, lo que necesitamos es que el equipo gane y si encajamos tantos goles algo no estaré haciendo bien", señalaba el portero barcelonés, diciendo que se sentía personalmente "hundido" y, como el resto del vestuario, "jodido".
"No ganamos un partido y necesitamos hacerlo para encontrar ese clic. Cuando lo hagamos estoy seguro de que alzaremos el vuelo; mañana hay que levantarse, entrenar y jugar con el Girona", añadía Badía para, a continuación, mostrarse convencido de que el parón afecte "bien" al equipo porque "a peor ya no podemos ir" y le ayudará "a limpiar la mente" y encarar los 24 encuentros ligueros siguientes con el objetivo "de hacerlo fantástico para salvarse".
En una línea similar se manifestaba Josan en la zona mixta del Municipal José Zorrilla. El extremo crevillentino abogó por "trabajar y corregir" los errores que les han llevado a ser colistas con solo 4 puntos (de 39 disputados) y a no conocer la victoria en las primeras 13 jornadas ligueras.
"El equipo no está bien y tampoco cuenta con confianza [...] no conseguimos generar (ocasiones). Salvo en la jugada del gol no hemos tirado a puerta y así es imposible", decía el futbolista del Elche, quien no escondía tampoco su anhelo de que una victoria sobre el Girona frene la caída del equipo y le permita irse al parón "con buenas sensaciones".