Ilusión después de dos años de tristeza

VALENCIA. Mestalla vuelve a sonreír. La manita que le endosó el equipo de Marcelino al colista Málaga CF sirvió para que el aficionado valencianista recuperara definitivamente la fe en su equipo después de dos años de sinsabores y de tristeza. En apenas cinco jornadas el equipo ha logrado dos victorias, tres empates, ha marcado nueve goles y ha encajado tres. Se compite, se defiende y se quiere siempre. La afición con eso tiene suficiente para entregarse a su equipo pero este martes encima vivió una goleada mágica.

En apenas unos minutos el equipo pasó de sufrir para aguantar la ventaja inicial que le dio el gol de Mina, tras magistral asistencia de Soler, a golear sin piedad a los andaluces. Neto fue el protagonista del primer acto con sus paradas salvadoras cuando el Valencia CF logró adelantarse en el marcador. El brasileño está empeñándose en despejar dudas con paradas decisivas desde el primer partido de Liga. Ayer fueron dos una a remate de Rolán y otra para salvar un disparo de Mula. Ahí tuvo el empate el equipo de Míchel pero no lo logró. En ese primer acto el conjunto de Marcelino ya dejó buenas sensaciones en ataque con buenas combinaciones y con un Guedes eléctrico que fue junto a Soler y Parejo los jugadores más destacados del equipo en ataque.

Pero el equipo se soltó la melena en el segundo acto. Otra buena jugada de Guedes, que empezó a enseñar la calidad y el desborde que lleva, terminó con una apertura para que Soler regalara otro gol, esta vez a Zaza. El italiano apareció al segundo palo y fusiló con la izquierda a la red. Su remate tuvo tanta rabia como su posterior celebración. En el primer acto se le anuló un gol mal anulado y luego no le pitaron un claro penalti. El ex de la Juve llegaba al partido con muchas ganas de resarcirse de su error el pasado sábado en el Ciudad de Valencia, cuando se enfadó mucho por no ser titular, y con ese gol sacó toda la rabia fuera. En apenas ocho minutos logró su primer hat-trick como profesional marcando un segundo tanto de cabeza tras una buena jugada del equipo y el tercero por confianza, lucha y definición. Fue la noche soñada para el delantero después de su primera suplencia de la temporada. Cerró el debate llevándose el balón a casa. 

Para ese momento, Mestalla ya estaba en éxtasis. La defensa había dejado de sufrir con Rolán, un buen delantero que hizo mucho daño en el primer acto, Kondogbia estaba dando una exhibición de lo que puede aportar, Parejo disfrutando y los delanteros buscando con hambre más goles. Marcelino oxigenó el equipo, dio aire a Zaza, Kondogbia y Parejo pensando en Anoeta y sacó a Rodrigo Moreno. El hispano-brasileño salió con ganas y cogió el brazalete de capitán que le cedió Parejo. Tuvo varias oportunidades pero cerró el partido en una gran combinación con Guedes que le tiró una pared con un maravilloso taconazo para que superara a Roberto y redondeara la noche. 

Marcaron los tres delanteros, Mina, Zaza y Rodrigo. El equipo goleó y no encajó. Mestalla vibró como no hacía en mucho tiempo y en la tabla se durmió en tercera posición. El próximo domingo habrá una batalla bastante más dura en San Sebastián pero ahora sí, el aficionado llegará a la paella del domingo con los nervios del partido de la noche porque sabe que su equipo está de vuelta y competirá sí o sí.