VALÈNCIA. El madrileño Javi Calleja aseguró este lunes que su despido del Levante le ha sorprendido “mucho”, ya que en su opinión la situación del equipo, a tres puntos de la zona de promoción de ascenso a Primera, es “nada alarmante” y desveló que lo cómodo para él hubiera sido marcharse el pasado verano.
En un comunicado publicado en X, Calleja aclaró que pese a que respeta “totalmente” la decisión tomada por la directiva y por el director deportivo, Felipe Miñambres, que será además quien le sustituya en el cargo, no la comparte ni él ni su cuerpo técnico.
“Es una decisión que nos ha sorprendido mucho. Durante esta racha de resultados negativos, el equipo ha jugado partidos muy buenos y se ha visto perjudicado por aspectos que no podemos controlar. El vestuario es una piña y estamos convencidos de que terminaríamos la temporada cumpliendo objetivos”, dijo el entrenador madrileño.
Calleja, que tras 27 jornadas de LaLiga Hypermotion deja al Levante en la décima posición con 39 puntos, llevaba cinco jornadas sin ganar y en su despedida explicó que hubiera sido “más fácil” para él marcharse el pasado verano después de caer en la final de la promoción de ascenso.
“El cambio de rumbo, a nivel económico, en el proyecto tras el no ascenso del año pasado nos dejó en una situación muy delicada y pensar en subir era más una ilusión que una obligación. En verano, lo más fácil habría sido no continuar, pero no quisimos abandonar el barco en los momentos difíciles y decidimos seguir a pesar de todas las dificultades”, aseguró.
“Dentro de las limitaciones, creo que formamos un grupo más que competitivo y lo hemos demostrado plantando cara a todos los rivales, pero no hemos podido terminar nuestro trabajo”, añadió.
Además, el ya exentrenador del Levante agradeció el trato “exquisito” de todos los trabajadores del club valenciano. “Nos sentíamos dentro de una gran familia. Nunca en mi vida tuve un trato tan cercano con los empleados y pude palpar su compromiso, su cariño y su apoyo incondicional”, resumió Calleja.