VALÈNCIA. Probablemente algún día los libros de historia futbolística recogerán la magnitud de la heróica tarea que futbolistas y entrenador del Valencia CF vienen haciendo en los tres últimos años por no dejarse llevar por el efecto arrastre de vivir en la peor gestión de la historia del mundo del balompié.
Que en una semana con bravuconada para presionar a las instituciones a que les aprueben un proyecto vergonzoso de estadio (acudiendo incluso al presidente de la patronal futbolera para hacer su órdago más grande). Que en este periodo en el que han rectificado tres veces el número de entradas que realmente se quedan para dejar sin ellas a sus abonados para la final de la Copa del día 23, y que además hayan corrido a gritar que el club no se vende ante un rumor salido en prensa con un comunicado con el escudo del club para rendir pleitesía al amado líder de Singapur (porque su interés está por encima del del club), tiene un mérito sin igual que la plantilla se encuentre inmersa en una final de Copa del Rey y peleando aún por alcanzar Europa vía Liga.
El día que todos estos gestores y sus acólitos desaparezcan del entorno y el murciélago pueda volver a volar a libre, además de un motivo para la felicidad, habrá otro para valorar en retrospectiva el enorme mérito de unos profesionales que soportaron sobre su hombros el peso de un club vacío de profesionales administrativos preparados y habilitados para desempeñar de manera diligente dichas competencias.
Que en pleno mes de abril este equipo esté en una final de Copa del Rey y aún mantenga posibilidades vía liga de intentar llegar a Europa es un milagro comparable al que Jesucristo llevó a cabo con Lázaro, al de los panes y los peces, o al de convertir el agua en vino en las bodas de Caná. Más cercano incluso a la ciencia ficción que a la mística.
Y aún con todo eso, la verdad es que el empate del sábado en La Cerámica entre Villarreal y Athletic vuelve a dejar a los de Bordalás la puerta abierta para cerrar la jornada 31 a dos puntos de la séptima (Villarreal, 46 puntos) y a uno de la octava (Athletic, 45) si el equipo blanquinegro es capaz de salir de Vallecas con los 3 puntos bajo el brazo.
Para ello, los de Bordalás llegan hasta la capital de España con la baja segura de Diakhaby por tarjetas, lo cual dada la poca o nula confianza del técnico en el refuerzo invernal Eray Cömert, la posibilidad de volver a un 4-1-4-1 como ocurrió en Elche parece una altenartiva más que probable. Además, son duda Foulquier y Marcos André (y el entrenador no ha dejado de repetir que todo el mundo mira de reojo a la Copa). Así que con el único jugador con el que se podría arriesgar porque no va a tomar parte en la final era con Maxi Gómez. Pero el pie del uruguayo no ha dado tal opción y se quedará probablemente en tierra.
Con todos esos condicionamientos, el posible once con el que el Valencia salte a Vallecas para competir por acercarse a la séptima plaza sea el compuesto por: Mamardashvili; Thierry, Gabriel, Alderete, Gayà; Yunus, Carlos Soler, Guillamón, Jesús Vázquez o Cömert; Hugo Duro y Guedes.
Por su lado, el Rayo, con las dudas propias de su mala racha, buscará su primera victoria liguera del año para no seguir acercándose peligrosamente al descenso mientras que el Valencia, con la mente puesta en la final de la Copa del Rey, espera asaltar el coliseo vallecano para mantenerse en la carrera por los puestos europeos.
El Rayo Vallecano se encuentra inmerso en plena crisis de resultados y acumula once partidos ligueros sin ganar, una mala racha que no encadenaba desde 2003, cuando estuvo trece jornadas sin celebrar una victoria y descendió como colista a Segunda.
Esta campaña, en lo que va de año 2022, el Rayo lleva once encuentros de Liga disputados, solo cinco goles marcados por dieciocho en contra y ha sumado tres puntos de 33 posibles.
Esa mala dinámica de resultados le ha hecho pasar de tener una renta de quince puntos sobre el descenso al término de la primera vuelta a esperar la visita del Valencia con solo cinco.
Para este partido, Andoni Iraola, que no podrá sentarse en el banquillo al estar sancionado, no podrá contar con el centrocampista Santi Comesaña, también sancionado. Su lugar en el once es probable que lo ocupe el senegalés Pathé Ciss, aunque no sería descartable que pudiera salir de inicio en ese puesto, retrasando su posición, Unai López.
La buena noticia para Iraola es que recupera al mediapunta argentino Oscar Trejo, sancionado la pasada jornada, y que volverá a actuar una línea por detrás de Sergi Guardiola.
-Alineaciones probables:
Rayo Vallecano: Dimitrievski; Balliu, Mario Suárez, Catena, Fran García; Valentín, Pathé Ciss; Isi Palazón, Trejo, Álvaro; Guardiola.
Valencia CF: Mamardashvili; Correia, Paulista, Alderete, Gayà; Musah, Soler, Guillamón, Gil o Cheryshev; Duro, Guedes.
Árbitro: Ricardo De Burgos Bengoetxea (Comité vasco).
Estadio: Vallecas.
Hora: 21.00 (desde las 20 horas en El Matx de 99.9 Plaza Radio,