La magistrada no ha contestado a la petición del fiscal que solicitaba el procesamiento de 42 personas, lo que ha llevado a las defensas a presentar peticiones de archivo en masa
VALENCIA. La nueva ley de plazos es clara, si se termina el tiempo previsto para la instrucción judicial de un tema y el fiscal no solicita la prórroga, el juez tiene solo dos opciones. Por un lado puede procesar a los investigados o, por otro, tiene la posibilidad de archivar la causa. En el caso del presunto amaño del partido celebrado entre el Levante y el Zaragoza, hace cerca de dos meses que el fiscal, ante la finalización del plazo de 18 meses de instrucción, advirtió de este hecho y solicitó a la juez del juzgado de instrucción número 8 de Valencia, Isabel Rodríguez, que procesara a los 42 investigados por el supuesto ‘tongo deportivo’.
Sin embargo, la magistrada no ha respondido al Ministerio Público pese al tiempo transcurrido desde el escrito del fiscal. Esta forma de actuar ha llevado a las defensas a inundar el juzgado de Rodríguez con peticiones masivas de sobreseimiento, según han explicado fuentes de toda solvencia a Valencia Plaza. Pero lo peor, según esas mismas fuentes, “no es la dilatación temporal sino las posibles dilaciones indebidas en las que podría estar incurriendo la juez y que, por otro lado, podrían acarrear reducciones en las futuras penas de los acusados en caso de ser condenados”.
Amaño
El caso del presunto amaño comenzó cuando presidente del Deportivo de la Coruña, Augusto César Lendoiro, llamó al presidente de la LFP, Javier Tebas, para avisarle de que aquel partido, disputado el 21 de mayo de 2011, podría estar amañado. Tras ser avisado por Lendoiro de este supuesto arreglo, Tebas denunció sus sospechas ante la Fiscalía Anticorrupción y esta acusó al entonces presidente del Zaragoza, Agapito Iglesias, dos consejeros, el director deportivo, el entrenador Javier Aguirre y los capitanes Gabi, Ponzio y Jorge López de haber acordado pagar 965.000 euros a los jugadores del Levante. El resultado final en el campo del Levante 1-2 envió aquella temporada al ‘Depor’ a segunda división.
En cuanto a las pruebas del presunto amaño, lo que verdaderamente hizo sospechar a los investigadores fueron las cuentas de los futbolistas. Al parecer, y según las investigaciones, en las cuentas de varios futbolistas del Zaragoza se ingresaron 120.000 euros unos días antes del partido en Valencia. Esos ingresos fueron retirados por los propietarios de las cuentas y, presuntamente, abonados en metálico a sus ‘rivales’ de partido en el Ciutat de València.
Según ha podido saber este periódico, la clave de la instrucción judicial para la Fiscalía ha estado en la investigación del patrimonio de los presuntos “untados”, así como en las cuentas del club maño. La fiscalía Anticorrupción basa su acusación en la salida de dinero del Zaragoza, en el incremento de patrimonio de varios jugadores levantinistas que no han podido justificar, en unas presuntas primas a los jugadores del Zaragoza que jamás se cobraron además de en el hecho de que algunos jugadores del Levante no utilizaran sus tarjetas de crédito desde la celebración del encuentro investigado hasta a varios meses después, algo inaudito ya que varios de ellos tenían una media de gasto superior a los 5.000 euros mensuales.
La lista de exjugadores del Levante UD investigados la forman Pallardó, Munúa, Héctor Rodas, Rafa Jordà, Rubén Suárez, Xavi Torres, Stuani, Wellington, Jefferson, Robusté, Javi Venta, Reina, Caicedo, Iborra, Xisco, Ballesteros, Juanfran y Cerra, otros 18 futbolistas del Zaragoza, así como el entrenador Javier Aguirre.