La manita relajá

VALÈNCIA. El otro día viendo un resumen de La Isla de las Tentaciones 3 –que acaba esta noche- se produjo una cómica situación en forma de advertencia que pasará a la historia de la televisión contemporánea: “Manué, la manita relajá”. Una frase que se hizo viral porque advertía del peligro que había de que Manué le fuera infiel a Lucía, algo que acabó sucediendo hasta en dos ocasiones. Una frase que apostilló con un “¿Ánde va?” que servía como recordatorio, como advertencia, como aviso al gran desastre que se avecinaba semanas después. Por eso, hoy haremos de Lucía, Manué y de Sandra Barneda si hace falta para advertir al Valencia CF de los posibles desastres que se vienen si no cambiamos cosas.

Javi Gracia, la manita relajá. La manita, el once y los ataques de entrenador. Estamos en el tramo final de temporada y aún no sabemos qué once es el mejor para sacarle rendimiento al equipo así que, por eso, no hagas experimentos. Relaja la innovación, intensifica la pasión. Puedes relajar todo menos los cambios, que si ya te cuesta hacerlos cuando el equipo va bien, no quiero ni contar cuando va mal. Queremos que oxigenes, refresques y des oportunidades por igual a futbolistas que llaman a la puerta. Y hablando de puerta, Jaume, la manita tú de todo menos relajá, que luego chutan fuerte y acaba en drama. Y Diakhaby, tú sin manitas, por si acaso.

Anil Murthy, la manita relajá. La manita y el dedito, para que no se te vuelva a ocurrir llevártelo a la boca, lo primero; pero tampoco teclear el móvil y concertar reuniones con agentes –que ya llevas un par- para planificar la próxima temporada. Aunque te lleves a Corona de oyente, comensal o interlocutor, que prepare un presidente el equipo para la próxima temporada no pasa ni en un equipo de Regional –que seguramente tendrá mucho más orden que el nuestro-. Deja a la gente de fútbol ese tipo de cosas y no ocupes en eso el tiempo que te queda en Valencia. De buen rollo.

Sr Lim, the relaxed little hand. Se lo pongo en inglés porque cuando toca algo, mete la gamba. Tal cual. Y lo que tiene que tocar, no lo toca. El mundo al revés o “the World upside down”.

Políticos de la terreta, la manita relajá. Bueno, más que la manita, la boquita, porque –aunque muchos tenéis mucha razón en muchas cosas- tampoco es como para que alguno y alguna esté día sí y día también dando la matraca con la ATE, las parcelas...en todos los medios habidos y por haber. Lo poco gusta y lo mucho cansa. Sabemos que el Valencia CF ha maniobrado mal, sabemos que la ATE –de la etapa del PP, por cierto- está desfasada y que se ha incumplido, pero puedes apretar a Meriton sin ahogar al Valencia CF. Por eso se están acercando posturas entre gobierno municipal, autónomico y club valencianista, no lo estropeen quienes hablan por no callar. Y eso que me encanta que un cargo público se moje y dé su opinión, pero una cosa es pronunciarse y otra estar a un paso de tener una sección en los medios de comunicación. Porque como dijo el bueno de Manué "Si te doy chocolate todos los días va a llegar un día que te vas a convertir en chocolatera".

Empresarios valencianos, a vosotros nada, ya estáis relajados desde hace muchos años.

Principe de Johor, la manita relajá, marajá. Ni se te ocurra mover esos deditos para poner stories para marear ya que, si no vas a tomártelo en serio, lo mejor es que te hagas a un lado y dejes que la cosa fluya por otros derroteros. Y lo digo porque el valencianismo está en un momento que no está para perder el tiempo con historias rocambolescas, sean de Johor o de Piedradura. Lucía, a todo lo que ha pasado, lanzaría un “Farzo ere”. Sin más.

De Torino a Mestalla, la manita relajá. Quien quede para hacerlo, claro. Porque últimamente por no relajar y meter la mano en todo ha acabado en desastre. Y ojo, me parece bien que sigan su camino independientemente de las salidas, pero obviar que ha sido un descalabro cuando grupos de gran calado y masa social han salido echando pestes… pues por mucho que se intente vender la moto… no hay ni ruedas.

Y para acabar también tengo para nosotros, los medios, que tenemos todo menos la manita relajá. No sé si por los aires de preguerra que corren, la precariedad que sufrimos  casi todos o porque directamente hemos llegado a un punto de no retorno.  Pero igual, si nos relajamos un poco nos iría algo mejor, sobre todo antes de que alguien en lugar de relajar saque la manita a pasear.

Porque el ambiente en el entorno valencianista, como dijo Manué “está más caliente que el queso de un San Jacobo”, así que si conseguimos relajarlo para bien –que no para mal- y acabamos bien lo que queda de temporada ya sabéis lo que habrá esta noche…

Esta noche, CARRICOCHE.