VALÈNCIA. La dudas a domicilio del Valencia, que esta semana va a jugar dos partidos seguidos fuera de casa ante el Eibar y el Villarreal, condicionan el camino del conjunto valenciano hacia los puestos de competiciones europeas de los que en estos momentos está fuera como octavo clasificado en la Liga.
La trayectoria del Valencia en la actual temporada está marcada por las diferencia entre su rendimiento como local y como visitante, ya que mientras en Mestalla no ha perdido, a domicilio no ha rendido conforme lo esperado y en los desplazamientos de 2020 ha salido casi siempre goleado.
De los 46 puntos que acumula el equipo, 34 (casi el 75 por ciento) los ha conseguido en Mestalla gracias a nueve victorias y siete empates, mientras que lejos de su estadio sólo ha sumado doce (cerca del 25 por ciento restante), merced a tres victorias, la última de ellas en diciembre, otros tantos empates y ocho derrotas.
La dinámica del club valenciano encuentra ahora un problema añadido en el calendario, ya que de los ocho partidos que restan en el campeonato todavía debe jugar cinco como visitante y tan solo tres en su estadio, circunstancia que, tras lo visto hasta el momento, no se puede considerar favorable para el cuadro de Albert Celades.
El técnico del Valencia puede presumir de no conocer la derrota en Liga en Mestalla, donde ha dirigido al equipo en los catorce últimos choques, ya que los dos primeros del campeonato los disputó el Valencia todavía con Marcelino García Toral en su banquillo, pero frente a esa buena línea es consciente de que fuera de casa no han conseguido convencer.
Para revertir esta situación, Celades tiene además de los dos encuentros de esta semana en Eibar y Villarreal, las posteriores visitas al Granada, Leganés y Sevilla, mientras que para refrendar su buena trayectoria en casa se le presentan tres oportunidades más ante Athletic de Bilbao, Valladolid y Espanyol
Con 46 puntos, el Valencia se encuentra a seis del objetivo inicial del campeonato: ser cuarto y repetir participación en la Liga de Campeones, pero antes de conseguirlo tiene que alcanzar los puestos de la Liga Europa, que tiene más próximos, ya que el Getafe es quinto con 48 y el Villarreal y la Real Sociedad le siguen en la tabla con 47.
Las goleadas recibidas a domicilio hacen que la diferencia particular de goles sea desfavorable con madrileños y donostiarras, mientras que con el equipo castellonense la dilucidará este domingo en La Cerámica tras la victoria por 2-1 de la primera vuelta en terreno valencianista.
Para acercarse al primero de los objetivos, el de entrar en puestos de Liga Europa, el Valencia debe hacer un especial esfuerzo defensivo, ya que es el único equipo de mitad de la tabla hacia arriba que tiene más goles en contra que a favor (43 recibidos y 41 marcados) y para ello debe seguir la línea iniciada ante Osasuna de mantener la portería, algo que no había logrado en los siete partidos anteriores, desde la victoria ante el Celta en Mestalla del 1 de febrero.
Se da la circunstancia de que aquel fue el último encuentro con el Valencia de Ezequiel Garay, uno de los baluartes de su retaguardia, que aquel día quedó lesionado de gravedad.