VALÈNCIA. Valencia Basket lo intentó todo, pero no pudo sacar la victoria ante Kutxabank Araski. El equipo luchó, pero la falta de acierto terminó por ser determinante. El sobreesfuerzo para sacar el triunfo en la J1 de la EuroLeague Women el pasado miércoles, sumado a las bajas que lleva sufriendo desde el inicio de pretemporada, lastró a las de Rubén Burgos. El conjunto taronja queda así con un 2-3 en LF Endesa.
El equipo salió con Leticia Romero, Queralt Casas, Eleanna Christinaki, Raquel Carrera y Lauren Cox. Empezaba el partido con un 0-4 visitante con Diarra haciendo mucho daño en el rebote ofensivo. Respondía bien Valencia Basket con un 6-0 liderado por Casas. Con poca anotación por parte de ambos equipos, el marcador reflejaba una gran igualdad y ningún equipo estaba dominando. Las sensaciones por parte del combinado taronja era de algo de precipitación y falta de acierto en las finalizaciones y había que ajustar mejor en defensa. Un parcial de 0-5 de Araski en el final de cuarto, con una Alarcón muy acertada, les concedía una primera ventaja.
El equipo vasco hacía crecer ese parcial a 0-9 en el inicio del segundo periodo, poniendo una ventaja de 9 puntos. Rubén Burgos pedía tiempo muerto. Carrera lo frenaba a continuación con una bandeja. Sin embargo, Asurmendi respondía con un triple. La renta visitante subía a 10 puntos. El combinado taronja reaccionó desde la defensa y Urieta pidió tiempo muerto antes de que se materializara en el marcador. Con un 5-0 elevaban su ventaja a 12 puntos y el técnico valenciano tenía que parar el partido de nuevo. Alarcón estaba haciendo mucho daño la subía a 16. No entraba nada. Casas pudo anotar desde el tiro libre en el último minuto, pero quedó esa diferencia al descanso (18-34).
Los primeros ataques del tercer cuarto fueron el reflejo de la primera parte. Buena defensa colectiva pero la pelota seguía sin querer entrar. La sensación era de impotencia. Burani hacía doblar su marcador con 18 de renta para las visitantes. En ese momento, un palmeo sobre la bocina de Carrera hacía anotar la primera canasta en juego del equipo taronja después de varios minutos de partido. Fue puro oxígeno. La insistencia hacia el aro provocó que las vascas se cargaran pronto de faltas y Valencia Basket pudo empezar a recortar desde el tiro libre. Un 7-0 y la diferencia quedaba en 11 puntos. La entrenadora de Kutxabank Araski pedía tiempo muerto. Atkinson salía de este golpeando en repetidas ocasiones y, pese a las réplicas taronja, las visitantes recuperaban una ventaja de 17 puntos al final del tercer cuarto.
La máxima diferencia del partido subía a 20 puntos de la mano de Van den Adel. Valencia Basket solo sumaba desde el tiro libre. Rubén Burgos propuso una defensa zonal que tampoco evitó que ellas anotaran. Tras canasta de Diarra, el entrenador pedía tiempo muerto. Cada vez quedaba menos tiempo, la distancia era muy grande y las sensaciones de cara al aro continuaban siendo las mismas. Pero el equipo no bajaba los brazos. Siguió insistiendo y tratando de bajar esa diferencia lo máximo posible. A falta de 3 minutos, entre Carrera y Casas la habían bajado a 13. Sin embargo, Asurmendi anotaba un triple que hacía mucho daño en un momento así. Rubén Burgos volvió a parar el partido intentando reducir al máximo, pero el triunfo se lo llevaban las vascas.