VALÈNCIA. Los aspectos a mejorar del Valencia CF de Rubén Baraja. La pretempora se antoja el escenario idóneo para que el cuerpo técnico encuentre solución a las 'debilidades' que afectaron al equipo durante la pasada temporada así como reforzar sus fortalezas.
Un factor que no se puede esquivar es que el Valencia CF tuvo una serie de problemas para encontrar el gol. Los valencianistas acabaron LaLiga con 40 goles, siendo el decimocuarto equipo de la competición en este apartado. De esa cifra, un tercio los anotó Hugo Duro. Para este curso, el Valencia CF ha acudido al mercado a por Rafa Mir, en el que recaerá una cuota importante de responsabilidad en esta faceta.
Por otro lado, el gol no solo es cosa de los delanteros. El Valencia CF ha echado en falta la aportación de la segunda línea. Al margen de Pepelu, que fue el máximo goleador a raiz de ejecutar los penaltis, entre Diego López, Fran Pérez, Amallah, Sergi Canós, y Peter Federico firmaron un total de cinco goles y solo anotaron los dos primeros.
En el centro del campo, Javi Guerra, Pepelu, Guillamón y André Almeida sí que tuvieron un peso superior al de los extremos puesto que registraron un total de 14 goles. Pepelu hizo siete, seguido de '8' valencianista con cuatro, Almeida firmó dos y Guillamón uno.
La gran asignatura pendiente del Valencia CF. La pizarra de Baraja se quedó en 'blanco' la pasada temporada. Solo los penaltis que ejecutó Pepelu dieron rédito en forma de goles. Además de no marcar ningún tanto de libre directo o córner, el Valencia CF tuvo fases de la temporada en la que experimentó muchos problemas para defender ese tipo de jugadas, encajando muchos goles que le costaron puntos.
El Valencia CF se ha convertido de la mano de Baraja en un equipo incómodo para sus rivales. La fortaleza defensiva, custodiada con el poderío de Mamardashvili, erigió al Valencia CF como un rival que concedía poco, pero también como un combinado al que le costaba generar ocasiones. De hecho, el Valencia se quedó sin marcar en un total de cinco de los 19 partidos que disputó en Mestalla, que acabó lastrando en la lucha por Europa.
Por último, Rubén Baraja encontró una base sólida sobre la que cimentar su idea, pero quedó algo 'huérfano' de soluciones a la hora de tirar de la 'Unidad B'. El fondo de armario está obligado a dar un paso al frente y si hace falta acudir al mercado a por jugadores que enriquezcan al técnico vallisoletano con diferentes perfiles.