VALÈNCIA. Natalia Muñoz es uno de los grandes nombres del skate español. La rider nacida en Arcos de la Frontera (Cádiz) hizo historia en los Juegos Olímpicos de París, ya que a sus 15 años, se convirtió en la deportista más joven de entre los casi 400 atletas que conformaron la delegación española que participó en los JJOO de 2024.
Ya con 16 años -Natalia nació el 26 de septiembre de 2008-, la deportista gaditana será uno de los nombres más destacados que participarán en la categoría femenina de Skate Street del VESO 2024, la misma modalidad en la que brilló en la capital francesa.
La precocidad ha sido una constante en la vida de Natalia Muñoz, por lo que no es de extrañar que sus inicios en el mundo del skateboard fueran con muy pocos años y gracias a su familia. “Empecé gracias a mi hermano, ya que tenía un skate en mi casa. Un día, con 6 años, me dio por cogerlo y ya no lo he soltado más”.
Metida ya de lleno en el skate, la rider encontró un espejo en el que mirarse. “Nunca he tenido skater preferido/a, pero en el que más me fijo y el que más me ayuda es Ignacio Morata”.
Como acostumbra a pasar en los deportes urbanos, lo que un día era un hobby, una forma de pasárselo bien, terminó siendo una forma de vida para Natalia. “Me di cuenta de esto sobre todo cuando me llamó la selección española, ya que vi que podía llegar a unas Olimpiadas”.
A pesar de ser una skater más que conocida, llevar años en el circuito y ser una profesional de este deporte que cada día tiene más adeptos, la joven skater de 16 años sigue tomándoselo como un deporte con el que se divierte: “Al final, es lo que más me gusta de este deporte. Espero que la diversión nunca se vaya”.
Por mucho que sea ya toda una veterana, Natalia Muñoz es casi siempre una de las atletas más jóvenes en la competición que participe, una situación que para la gaditana es anecdótica: “Al final somos todas casi de la misma edad, apenas se nota la diferencia de uno o dos años más”.
Sin ninguna duda, el mejor momento en su carrera deportiva fue participar en los Juegos Olímpicos de París 2024, un premio a su esfuerzo y habilidades. “Para mi fue una gran experiencia, ya que después de haber competido durante 2 años para conseguir la clasificación fue como un alivio y a la vez lo disfruté al máximo. En la competición me puse un poco más nerviosa y fallé el último truco de mi ronda, pero aun así salí de allí super contenta”.
El ser todavía una adolescente implica que tiene que atender a sus estudios. Cuando representó a España en la capital francesa, Natalia acababa de terminar la ESO, pero seguir con su brillante carrera como skater no le ha impedido seguir adelante con su formación académica. “La verdad que me costó sacarme 4 de la ESO porque justo me pilló en las últimas competiciones y eran las más importantes. Pero al final conseguí sacarlo y ahora estoy estudiando un grado de deportes, que me gusta más”.