VALÈNCIA. Los cedidos hacen méritos para seguir en el Valencia CF. Cerca de alcanzar el ecuador de la temporada, los fichajes han ido cogiendo fuerza en los esquemas de Bordalás y están dando motivos para que el club de Mestalla haga un esfuerzo por su continuidad en el futuro si las maltrechas arcas del club lo permiten. De hecho, la inversión más alta ha sido Marcos André, pero es al que más le está costando ganarse un sitio en las alineaciones.
Giorgi Mamardashvili fue una de las grandes noticias del inicio de temporada. Llegó para jugar en el filial, pero su adaptación a una nueva cultura, con la dificultad del idioma y su juventud no fue un problema para hacerse con la portería del Valencia. Aprovechó la ausencia de Cillessen y Jaume y le ganó la partida a Cristian Rivero. La exigencia de Primera división le ha relegado al banquillo, pero Bordalás lo mantuvo como segundo portero ante el Athletic. Tiene margen de mejora. El Valencia tiene una opción de compra por Mamardashvili de un millón de euros, pero también goza de una fórmula de pagar en dos plazos hasta los 850.000 euros si realiza el primer movimiento antes del 1 de enero.
En lo que concierne a Omar Alderete, se ha erigido como una pieza clave para Bordalás, que insistió mucho el pasado verano en cerrar su cesión con opción de compra con el Hertha de Berlín. El paraguayo está cedido con una opción de compra de 7,5 millones de euros condicionada a jugar competición europea la próxima temporada o disputar un total de 25 partidos. Alderete ya ha jugado más de la mitad de los partidos necesarios y en caso de ejecutarse la opción de compra, Alderete pasará a ser propiedad del Valencia hasta junio de 2025.
Por otro lado, Hélder Costa es otro de los futbolistas que ha conseguido ganarse la confianza de Bordalás. El extremo angoleño se ha hecho con un puesto en el equipo sin hacer mucho ruido. Lejos de venirse abajo tras comenzar en las últimas posiciones en la rotación, Hélder Costa ha recogido el guante del técnico alicantino y está ganando peso cada semana. Su tardía llegada el último día de mercado y no contar con el perfil que agradaba a Bordalás le pasaron factura. Pese a que está dejando buenas sensaciones, su continuidad está lejos del alcance del Valencia CF. El Valencia puede quedarse en propiedad si paga una opción de compra que ronda los 18-20 millones. Una vía casi imposible después de que el Valencia desvelara sus problemas económicas en sus cuentas con la obligación de ventas por valor de 37 millones de euros y disponer del limite salarial más bajo de la categoría.
Por último, Hugo Duro es otro de los jugadores cedidos en el Valencia que están superando las expectativas depositadas en su incorporación. El madrileño está siendo una pieza bastante utilizada por Bordalás y es el máximo goleador junto a Soler con cinco dianas. El Valencia pagó al Getafe 250.000 euros por la cesión del atacante de 22 años y se ha guardado una opción de compra de cuatro millones de euros.