VILA-REAL (EFE). El entrenador del Villarreal, Marcelino García Toral, aseguró este miércoles que su equipo debe generar oportunidades y ser solvente en defensa si quiere derrotar mañana al Panathinaikos en un encuentro correspondiente a la quinta jornada de la Europa League.
El preparador asturiano garantizó, en rueda de prensa, que su equipo le da la “la máxima importancia siempre al próximo partido”, ya que entiende que esa mentalidad “nos hace acercarnos a la victoria independientemente del rival y la competición”.
“Vengo a un club con tres entrenadores. No es lo habitual y ahora debemos recuperar la normalidad y rehacernos lo antes posible”, comentó el técnico, quien admitió que su conocimiento del rival, al que ya se enfrentó en agosto como entrenador del Marsella en la fase previa de la Liga de Campeones, puede “ayudar” a su planteamiento, si bien precisó que ambas plantillas no son comparables.
“Tenemos idea de juego diferente. A la hora de contrarrestar su juego, sí que los conocemos y sabemos cómo juegan y dónde nos pueden generar problemas y nosotros a ellos”, precisó Marcelino, quien negó tener un sentimiento de revancha con el equipo heleno tras haber quedado apeado de la Liga de Campeones.
“La venganza y la revancha no existen en mi forma de pensar. Afronto cada partido con el ánimo de ganar, respetando al máximo al rival. Es importante ganar porque nos clasifica”, argumentó.
El entrenador del Villarreal pronosticó un partido “complicado” ante un rival “acostumbrado a ganar”. “Es un equipo competitivo y con jugadores expertos. Nunca se dan por vencidos. Tenemos que afrontar el partido con el objetivo de ganar en mente”, explicó el asturiano, que señaló que una de las claves para su equipo será mejorar la seguridad defensiva.
“Venimos encajando mucho y queremos parar esos números negativos que nos están lastrando”, confesó Marcelino, que descartó realizar rotaciones en su alineación para este jueves.
“Venimos del descanso del parón y no hay tanta carga. Ganar supone casi clasificarnos matemáticamente. Lo que puedas hacer hoy no lo dejes para mañana”, aseguró el técnico, quien adelantó que no correrá riesgos de recaídas con los jugadores que están en la recta final de su proceso de recuperación.
En este sentido, el entrenador no dio pistas sobre la presencia de Francis Coquelin y Matteo Gabbia, dos jugadores que han sufrido problemas físicos y que están en la recta final de su rehabilitación.
“Es prematuro que salgan de primeras, pero valoraremos con el cuerpo médico si están disponibles para ayudarnos”, dijo el asturiano, que se mostró más pesimista al valorar el regreso de Denis Suárez, ya que indicó que es “poco probable” que reaparezca antes de Navidad.
El entrenador del Villarreal también se refirió al delantero Ben Brereton y a su falta de adaptación al equipo. “Es pronto para establecer cualquier opinión. Para los ingleses, no es fácil la adaptación al fútbol español. Tenemos que ser pacientes. Debe integrarse lo más rápidamente posible y confiar en sus posibilidades”, concluyó.