VALÈNCIA. La reciente destitución de Javi Gracia como técnico del Leeds con tan solo 12 partidos dirigidos sigue poniendo la máxima de que los entrenadores que pasan por la trituradora en la que Peter Lim construido el banquillo del Valencia CF, ven como sus carreras se estancan o retroceden. Le pasó al propio Gracia que tras su esperpéntica aventura en Mestalla, tuvo que marcharse a la liga Qatarí dónde firmó por el Al Saad (donde sucedió al hoy entrenador del Barça Xavi Hernández). A pesar de conquistar allí el torneo, Javi Gracia no dudó en salir de aquella liga rumbo a la Premier para hacerse cargo de un Leeds en posiciónes de descenso. Tras 12 partidos las cosas no han mejorado, Javi Gracia ha sido destituido y su sustituto es Sammy Allardyce.
El de Gracia es un caso más. Si miramos la trayectoria de los técnicos escogidos por Meriton (con la excepción de Marcelino que se fue al Athletic, ganó una Supercopa y sigue como futurible para la selección según la imagen que dé Luís de la Fuente en la Nations League de este verano), veremos que ninguno de ellos ha mejorado su carrera profesional e incluso alguno de ellos ni siquiera ha vuelto a entrenar.
El primero de la lista fue Nuno Espírito Santo, quien tras ser destituido en la temporada 2015/16 siguíó caminando de la mano de Jorge Mendes. De este modo pasó por dos equipos en los que la influencia del súper agente portugués es incontestable. Su siguiente parada fue en Oporto, equipo de la ciudad de Mendes y donde tiene su sede central su agencia Gestifute. Tras un año, se fue a la segunda división inglesa a otro club participado por el portugués, el Wolverhampton. Allí consiguió el ascenso a primera división en la temporada 2017/18. Fue séptimo dos temporadas y 13ª una más, y de ahí le llegó el salto a uno de los grandes, le contrató el Tottenham Hotspurs. Sin embargo su aventura sólo duró 10 partidos de los que perdió la mitad. Tras su fugaz paso por los "Spurs", Nuno entrena ahora en el Al-Ittihad de Arabia Saudita.
Su sustituto fue Gary Neville, de infausto recuerdo para la afición valencianista. El inglés aterrizó en el banquillo de Mestalla por ser amigo del propietario y socio en algunos de sus negocios en el Reino Unido, y pese a ello, 28 partidos después y de llevar el Valencia de la zona media de la tabla a pelear por el descenso, se volvió a sus labores como comentarista en la cadena británica Sky Sports. De allí nunca debió haber salido y la realidad marca que nunca más volvió a pisar un banquillo.
El sustituto de Neville fue Pako Ayestarán. El ex preparador físico de la época del doblete de 2004 que se separó profesionalmente del madrileño con la idea de hacer carrera como entrenador recaló en el cuerpo técnico de Gary Neville con el fin de ayudarle con el idioma. Fue la solución de emergencia para el equipo y aguantó 12 partidos (8 de la temporada 15/16 y 4 más de la 16/17) y sólo ganó 4 de ellos. Tras ser despedido volvió a la liga española en la UD Las Palmas en la que tampoco acabó bien. De ahí un año a México (al Pachuca) y luego dos años en el modesto Tondela de la liga portuguesa. A día de hoy, ha aparcado sus ganas de ser primer entrenador y trabaja enrolado en el cuerpo técnico de Unai Emery en el Aston Villa.
Le sucedió Cesare Prandelli. El italiano aterrizaba en Mestalla como nombre con currículum para intentar frenar la primera gran crisis de Meriton tras plagar el equipo de futbolistas de Mendes sin ningún nivel (Bakkali, Aderllan Santos, Aymen Abdennour, etc, etc). El italiano llegó en octubre y se fue en diciembre. Tras 10 partidos, Prandelli se marchó harto de las mentiras de Lim y su séquito (Layhoon, García Pitarch y un Anil Murthy que ya campaba a sus anchas por el club). Las frases de Prandelli en su despedida en su dimisión tras su adiós fueron uno de los mayores retratos que un profesional del fútbol le ha hecho a Lim y su proyecto: "Esta sociedad está regida por personas de números. Pero el fútbol va más allá de lo matemático. Se necesita pasión, sentimiento. Sin esto el fútbol queda desnudo", "Peter Lim me prometió que en enero reforzaríamos el equipo cuando nos vimos en Singapur. Me habían prometido reforzar el equipo y sobre todo un nombre, el de Simone Zaza, en quien habíamos centrado todos los esfuerzos. Me dijo que el proyecto inicial de cuatro jugadores se limitaba a un solo jugador" o "Quería abrir Paterna a la afición y el club me dijo que no era posible, he tratado de hablar con la prensa y he visto que había una lista negra". Tras su renuncia, Prandelli entrenó al Al Nassr de los Emiratos Árabes. Después dos breves experiencias en su país como "apagafuegos" en Génova (18/19, salvó el descenso in extremis) y Fiorentina (20/21, acabó 13º). Hace escasamente dos meses el ex técnico de la selección italiana anunció que colgaba el chándal y dejaba de entrenar.
La llegada de Albert Celades a Valencia no pudo ser más convulsa. Cogió un proyecto en llamas dinamitado por Peter Lim que vino a destruir un equipo ganador. El catalán llegó de la mano de Mendes tras recomendación de Lopetegui (que era la primera elección pero ese verano fichó por el Sevilla). Celades había sido seleccionador sub 21 pero su inexperiencia y su falta de carácter hicieron que la RFEF confiara en el director técnico Fernando Hierro para el mundial de 2018 en lugar de por el que era entonces su segundo tras el episodio-espantada de Lopetegui y su fichaje por el Madrid. El ex jugador de Barcelona y Real Madrid aterrizó en medio de una guerra civil y con una plantilla descontenta por la decisión tomada con Marcelino. Al catalán además le pillo por medio el parón de la liga por Covid. Tras 29 jornadas de liga, sere eliminado de la Copa (vigente campeón) por el Granada y superar la primera fase de la Champions pero ser ampliamente superado por la Atalanta en octavos, el Valencia CF le destituyó a falta de 6 jornadas para el final y cuando era evidente el desplome de un equipo que sería incapaz de volver a Europa. Desde aquel encuentro de la jornada 32 en La Cerámica jugado el 28 de junio de 2020 con derrota 2-0 ante el Villarreal, Albert Celades no ha vuelto a sentarse en un banquillo.
La última víctima de Lim y de Meriton fue José Bordalás. Otro técnico al que mintieron y le vendieron futbolistas con la temporada en marcha. Aún así dejó al Valencia CF noveno en la clasificación y lo metió en la final de la Copa del Rey. Un penalti privó al técnico alicantino de ser campeón con los de Mestalla, aunque hubiera dado lo mismo porque para la fecha de la final ya se había puesto en marcha la trituradora en Singapur y los primeros contactos con Gattuso ya estaban en marcha. Tras un año casi en blanco, Bordalás volvió el miércoles pasado al Getafe con el encargo de salvarlo de la quema. La jugada macabra del destino es que si lo hace puede que se lleve por delante al Valencia CF.
El último en pasar por la trituradora singapurense fue Gennaro Gattuso. Pese a llegar de la mano de Jorge Mendes y de exhibir al principio una buena sintonía con la propiedad, acabó dando la "espantada" tras comprobar la nueva batería de mentiras activada desde Singapur (con la colaboración de Layhoon y de Corona). La pregunta es si su carrera como entrenador también acabará viéndose afectada en el futuro por el estigma de la gestión de Peter Lim.