La organización elabora un protocolo para que entre diez y doce mil espectadores puedan asistir a la carrera del 15 de noviembre, pero subrayan que estará bajo la decisión de las autoridades sanitarias competentes
VALÈNCIA. Entre los próximos 8 y 15 de noviembre, el Circuit Ricardo Tormo albergará los Grandes Premios de Europa, primero, y de la Comunitat Valenciana, después, en tiempos del coronavirus. Dos carreras del Mundial de Motociclismo en un año excepcional. El director del Circuit, Gonzalo Gobert (Castellón, 1969), y su equipo están inmersos en la organización de estas pruebas y elaboran un protocolo sanitario para intentar que en el GP de la Comunitat Valenciana pueda haber público. Trabajan en un plan completo, si bien queda bajo la decisión de las autoridades sanitarias competentes, que determinarán si es posible que los aficionados -se baraja una cifra entre los diez y los doce mil espectadores- pueden estar en las gradas del Ricardo Tormo como ya ha sucedido en este campeonato del Mundo en el circuito de Misano. Gobert reflexiona sobre las dos carreras, el protocolo sanitario o la actividad en el Circuit en tiempos de la Covid-19 en esta entrevista en Plazadeportiva.com.
-Durante los primeros meses de la pandemia hubo serias dudas de que pudiera celebrarse el Mundial ¿Cómo recibieron la confirmación no solo de que habría, sino de que el Circuit albergaría carreras?
-Fue una buena noticia para nosotros y al final seguimos en el escaparate. Lo que hizo Dorna, mirándose en el espejo de F-1, fue asegurarse el desarrollo del Mundial. Primero, porque tener un campeonato en blanco es un borrón en la historia. Segundo, porque de las tres porciones que componen la tarta de los ingresos de estos promotores como F-1 y MotoGP, que son marketing, canon de los circuitos y televisión, solo se podía aspirar de una forma razonable a tener el de televisión. Negociando con los ministerios de Sanidad de los países donde podía haber GP, y sin viajar mucho, porque se ha concentrado en Europa, haciendo como en España con dos carreras por circuito, menos Barcelona que tiene una, se conseguía un número de carreras que daba para un Mundial. De tal forma, al menos nos asegurábamos tener un Mundial y se aseguraban los derechos de la televisión. Y además mantener el vínculo con los aficionados y evitar un año en blanco. Y desde nuestro parte, tanto Circuit como Generalitat, desde la Dirección General de Deportes, tuvimos claro que podíamos ayudar, máxime a un proveedor pero, además, un socio como es Dorna. Cuando nos dijeron de hacer las dos carreras respondimos que encantados. Se nos dijo que no había canon pagadero y que existía la posibilidad de este año no ser la última carrera del Mundial. Entendimos lo peculiar y las necesidades de este año y fuimos muy flexibles.
-El confinamiento llegó relativamente poco después de que se anunciara la ampliación del contrato hasta 2026 para seguir albergando el GP de la Comunitat. Sin embargo, el escenario ha cambiado enormemente por la crisis sanitaria para este año.
-Efectivamente. Y ha sido un poco como se dice en Bolsa en el análisis técnico que es que sirve hasta que hay noticias. Nosotros teníamos una hoja de ruta muy clara, muy definida, todo indicaba que íbamos a la alternancia, con sus retrasos. Ahora si tuviera que apostar por la alternancia diría que sí, pero quizás tarda más de lo esperado. Entiendo que esta epidemia tiene un efecto de destrucción de riqueza potente y unas emergencias diferentes a las que había hasta ahora. Entonces las prioridades de los gobiernos del mundo serán diferentes y creo que habrá retrasos importantes en muchos de los proyectos que había encima de la mesa. La intuición me dice que se reprograma todo y me dice que nosotros, en condiciones normales, seguiremos con la tónica acostumbrada. Firmaremos la alternancia obviamente, pero seguiremos en el calendario.
-¿Cómo están viendo el desarrollo de competición y organización de pruebas todas las semanas respecto a la situación convencional en la que cada GP se desarrollaba cada dos semanas?
-Lo veo estresante y lo veo raro; se ve que las carreras son un poco locas. Venimos de una época en la que hemos estado parados, dos, tres, cuatro meses y después de ese parón se ha quedado mucho trabajo acumulado y hay que apretar el acelerador. A nivel deportivo, entiendo que para los pilotos de un deporte tan exigente como el motociclismo, que necesita de tanta concentración, que necesita que estés muy fino físicamente, y un montón de factores más, pues la situación los tiene bajo presión. Ves las carreras y son un poco locas. Ves las clasificaciones y están bastante apretadas en general, porque salvo alguno que pueda haber sacado la cabeza, con una realidad deportiva y con una exigencia como la actual yendo tan deprisa, les somete a presión y es difícil aguantarla.
-¿Los campeones se decidirán al final o prácticamente al final del Mundial?
-Pienso que sí. Pero nosotros, especialmente el segundo Gran Premio que vamos a organizar, el de la Comunitat Valenciana del 15 de noviembre, creo que sí tendremos algún campeonato para decidir en el Circuit.
-Dos Grandes Premios en el Ricardo Tormo: GP de Europa, el 8 de noviembre y sin público, y el GP de la Comunitat, el 15 de noviembre y con la posibilidad de que haya aficionados.
-Nosotros vamos a plantear un programa piloto, un protocolo, a Sanidad, que es quien debe decidir. Será un plan bastante lógico en una instalación que puede admitir público de una forma muy característica por la amplitud de la misma. ¿De dónde viene la decisión del GP de Europa sin público y el de la Comunitat con aficionados? En el primer caso, para cuando tuviéramos el sí de Sanidad quizás nos quedarían 15 días o una semana de puesta a la venta de las entradas. Con ese periodo no venderíamos muchos tickets y en cambio el coste del dispositivo que necesitaríamos para las exigencias de Sanidad para admitir público es muy alto y tampoco estamos para dispendios. En cambio, para la segunda carrera, sí partimos de la venta anticipada de principio de año cuando todavía no se sabía el tema de la pandemia.
-Ya abrieron una ventana para devolución.
-Nosotros paramos la venta anticipada a mediados de marzo para la carrera de 2020, pero ya habíamos vendido un 25% del aforo aproximadamente. Abrimos la primera ventana de reembolso de los tickets para los aficionados y más o menos una cuarta parte pidió la devolución de su dinero, pero el resto no. Seguimos teniendo 18.000 entradas vendidas. Como volvió a cambiar la fecha del GP, vamos a abrir otra ventana para reembolso a los aficionados, porque como decimos siempre: tenemos clientes, no rehenes. Sabemos que muchos de ellos van a querer venir ante la posibilidad de asistir a la carrera.
-¿Qué propuesta tienen en clave de número de seguidores?
-Estamos hablando de un evento con unos diez o doce mil espectadores. Para un circuito como el Ricardo Tormo, tanto por el aforo como por la amplitud del mismo, pues esa cifra que proponemos es poco.
En todo caso, es una decisión de las autoridades sanitarias y vamos a acatar, lógicamente, lo que nos diga Sanidad. Lo primero es la seguridad sanitaria
-¿Cuáles son los parámetros de ese protocolo sanitario que presentarán a Sanidad?
-Llevamos un trabajo de fondo bastante potente. Hemos hablado con Dirección General de Deportes de la Generalitat para explicar nuestros planes a la Conselleria. Hemos hablado con Dorna. Lo hemos hecho también con la Federación Española de Motociclismo. Y particularmente también he hablado con los directores de Motorland y Barcelona-Catalunya para ver qué había pasado y cuáles eran sus expectativas y lo iban a hacer sin público directamente. Pero también he hablado con el director de Misano, donde sí hubo público, para ver sus conclusiones y el evento fue fantásticamente. Nos ha pasado material que vamos a copiar y adaptar y que nos va a ayudar mucho y vamos a enriquecer con nuestras ideas. Hay una diferencia fundamental entre Italia y España: aquí el uso de la mascarilla en una instalación deportiva es obligatoria en todo momento y allí no. Además, estamos trabajando con ticketing para respetar la distancia de seguridad en las gradas. Como barajamos unos 12.000 espectadores, aquí repartidos va a haber muchos huecos para garantizar esa distancia. El reajustar y marcar en las gradas tiene un coste adicional. Y además vamos a llevar todo un protocolo en la admisión: esterilización, toma de temperatura, toma de datos de aquellos que nos lo tengamos para poder tener trazabilidad por si nos la pide Sanidad, espacios más grandes en los parkings,... En fin, lo juntas todo y creo que es un evento muy seguro. Podemos ver muchas actividades que hace la gente diariamente en las ciudades que pueden ser más arriesgadas de contagio de lo que puede ser estar aquí, que hay que recordar que es todo al aire libre.
-Se han realizado eventos deportivos con público incluso siendo recintos cerrados. Por ejemplo, el tour amistoso de la Euroliga desarrollado en la Fonteta.
-Aquí es cierto que proponemos más gente, pero tenemos la amplitud de la instalación, la capacidad y el hecho de que sea al aire libre. Los procedentes nos ayudan. Ese mismo ejemplo de la Fonteta que salió muy bien y además ha sido en la Comunitat Valenciana. Y nos ayuda en cuanto a la misma industria del motor los precedentes de Misano y Le Mans. Si en Italia y en Francia lo organizan, por qué aquí no.
-En todo caso, la autorización la determinará Sanidad.
-Desde luego. Quiero recalcar que estamos aquí para ayudar, estamos en el mismo bando que las autoridades, y vamos a estar al son de la música de Sanidad. Vamos a presentar un proyecto piloto muy ambicioso y muy detallado, donde vamos a plantear cuatro burbujas diferentes que no van a tener comunicación entre ellas: hablo de Dorna y tres burbujas para el público en función de las gradas y los parkings para que no se crucen esos diez o doce mil aficionados que estimamos. Pero se lo vamos a poner muy fácil a Sanidad. Y si nos dice que hay que hacer esto, esto y esto, pues vamos a acatar. O si nos dice, en estos momentos con el pico que hay de la pandemia es imposible, pues acataremos igualmente. Pero entendemos que es parte de nuestra responsabilidad tanto económica como para empezar a mover la instalación dar el paso en este sentido.
-Esa presencia de público que plantean podría dar algo de aire al sector hotelero.
-Esa es una clave. Y otra es que los aficionados al Circuit son muy fieles. Tenemos estudios que dicen que el 50% repite y es como que se lo debemos. Y la tercera pata es el impulso de los eventos deportivos multitudinarios. Está claro que no es una situación normal, pero creo que hay intentar por lo menos dar un pasito. No es volver a la normalidad, sino un pasito pequeño, que entendemos que la instalación lo acepta y hay que intentarlo.
-¿Qué feedback tienen respecto a ese protocolo que están elaborando?
-Dorna nos ha dicho que está completamente de nuestro lado. Es decir, nos apoya pero en esto no entra, porque es una tema cuya decisión va a ser de las autoridades sanitarias de la Comunitat Valenciana y de conselleria de Deportes. Federación también está con nosotros a tope. Además, como decía, hablé con el director general de Misano, Andrea Albani, y me comentó que lleva un tema exhaustivo de información, hay que ponerle más refuerzo de gente en las puertas, más efectivos en las gradas para que los aficionados se sienten donde toca y, en nuestro caso, verificar que llevan la mascarilla, pero que en su caso el evento se desarrolló con normalidad. En todo caso, la idea por nuestra parte es que queremos dar ese paso con responsabilidad a que haya público, pero acatando lo que diga Sanidad. Lo primero es la seguridad sanitaria: si hay opción de que pueda haber aficionados, perfecto, pero si existe algún riesgo pues será sin público.
-En el marco deportivo, novedad dentro de este escenario es que Valencia no cierra el Mundial.
-Por su puesto fuimos flexibles con la propuesta de Dorna. Les faltaba una carrera para cuadrar una campeonato mejor, para darle algo más de extensión, y se entendía su punto de vista. Luego, salir de Europa era complicado para ellos. Hacer el periplo asiático con todo el protocolo que tienen de la burbuja, subir a todos los pilotos y a la gente de Dorna en aviones, quedó descartado. Entonces, en esas fechas se tienen que ir al sur de Europa. Y ahí además de nosotros está Portimao en Portugal, que también es un circuito chulo. En todo caso, en el contrato firmado de la alternancia pone que nosotros seguimos siendo la última carrera. Es un año excepcional.
-Más allá del Gran Premio ¿Qué balance hacen de la actividad que se ha podido ir desarrollando en las instalaciones?
-En cuanto a eventos, no se han cancelado muchos solo alguna carrera. Por ejemplo, la Federación Española de Automovilismo pospuso el CET por falta de participantes al año que viene. Hemos mantenido el grueso de eventos. Ya hicimos el Festival de Clásicos. Mantenemos la NASCAR, además con doble final, puesto que se anuló Hockenheim y viene aquí. A nivel de alquiler de la pista lo hemos notado mucho. Primero hemos notado, aunque sea obvio, el mes que estuvimos cerrados, que es temporada alta para nosotros en cuanto al alquiler por entrenamientos, presentaciones, etcétera. La industria automovilística, los fabricantes, está parada y están haciendo planes vista a 2022 o 2023, lo que ha conllevado anulación de presentaciones de muchos vehículos. De aquí a final de año, como tenemos mucha carrera, hay bastante actividad. El uso de la pista ha bajado también en julio y agosto; eso es importante para nosotros porque trae movimiento actividad a hoteles y restaurantes y porque es el segundo mayor ingreso del Circuit.
-Hay que hacer equilibrios para la gestión económica y estructural del Circuit.
-Hemos hecho bastantes cosas. En el Circuit, nada más empezar el confinamiento, paramos el tema de nuevas inversiones y mantenimiento, ciñéndonos a lo esencial. Igual se hizo con las compras de consumibles. Lo que no hemos parado son las escuelas, la Cuna de Campeones y la Fórmula de Campeones, que han seguido su ritmo también reduciendo el número de carreras, de forma concentrada. Lo veo algo bueno, porque en un año tan raro tampoco debes ir a máximos, debes ser un poquito conservador y no pasa nada. Gastas menos y vas a seguir teniendo tu resultado.
-¿Cuál es la previsión para los próximos meses?
-De aquí a diciembre, aunque con menos actividad, la pista está bastante llena. Tendremos en la tercera semana de diciembre los entrenos de Fórmulas de todos los años y están entrando peticiones. Vamos a tener los tanderos. En fin, está bastante bien. Entran peticiones para 2021; no está a tope la instalación, no es como antes, pero está bastante parecido. Somos bastante estables. Últimamente ha oscilado el número de eventos para público de 12 a 18. El programa para el año que viene seguirá estando con los principales carreras, con ajustes. Y luego tenemos clientes fijos como equipos de competición que vienen a entrenar o tanderos y tampoco va a morir, porque la competición sigue funcionando. Es decir, tenemos un porcentaje bastante alto de normalidad de actividad. Se puede ver con cierto optimismo. Lo único que me da un poco de respeto, es que con el horizonte que puede haber pues hay que ir con mucho cuidado con los dispendios, las inversiones que se hacen, hay que pensarlo todo muy bien, porque hay que recordar que esta empresa es deficitaria, porque la organización del Gran Premio nos mete en pérdidas y hay que tener cuidado.