La visita del Celta es un partido crucial para este Valencia que tan buen papel está dando desde que comenzó la temporada...
VALÈNCIA. La visita del Celta es un partido crucial para este Valencia que tan buen papel está dando desde que comenzó la temporada. Llegamos tras una derrota inesperada ante el Getafe -con polémica o no sobre el césped, pero eso es otra historia- y con la obligación de seguir creyendo en este equipo que tan buenos resultados está cosechando en la presente temporada. Pero para seguir creyendo sin dudas es necesario que el Valencia retome el camino de la victoria y nos haga creer que este equipo -justito en cuanto a número de jugadores y con alguna baja importante- sí puede ser capaz de hacernos soñar con el futuro y de hacernos creer que ese futuro inmediato pasa por Europa.
SOLO EUROPA
Y ojo, he sido muy claro cuando digo la palabra 'Europa' sin entrar en más explicaciones. No digo clasificación que de derecho a jugar la próxima Champions. Hablo solo de Europa -lo cual incluye Europa League- y doy por hecho que sería un paso de gigante del Valencia clasificarse para alguna de esas competiciones que no debería abandonar nunca y que en los últimos años quedaban absolutamente lejos de las perspectivas de este equipo. El Valencia nunca ha sido un equipo vulgar con resultados con resultados vulgares y únicamente la inicial presencia de Peter Lim al frente de la nave nos hizo pasar por un calvario tremendo que esta temporada debería cambiar de forma categórica.
UN SÁBADO MUY SIMPLE
Por eso el partido de este sábado debe servir no sólo para disputar y ganar los tres puntos en juego. El Valencia se juega todavía más. El Valencia se juega creer a muerte en este proyecto y dos derrotas seguidas serían un golpe tremendo para una afición ilusionada y entregada a partes iguales. Y sí, yo también en este camino le doy un voto de confianza a la plantilla. Incluido Zaza, un tipo que sí que arrastra problemas en su menisco -no en el tobillo-, y que pese a jugar mal ante la escuadra de Osasuna ha llegado el momento de que de un paso al frente en su propio campo y retome la seña del gol y del buen juego. El Valencia se merece tener un '9' entregado a la causa y con acierto. Y ese '9' debe ser Zaza... el único que tenemos hoy por hoy.
PARTE DE LA CREDIBILIDAD
Y sí, el Valencia se juega mucho más que esos tres puntos. Se juega gran parte de su credibilidad en este duelo. Perder contra el Celta en su propia casa sería un golpe demasiado duro para una afición que se está dejando la piel desde que comenzó el campeonato. Si yo fuera jugador del Valencia le haría un caso tremendo a Marcelino, claro, pero luego pensaría en esos aficionados que quieren y creen en su equipo de forma innegociable. Ellos -al menos para mi- se lo merecen todo por parte de los jugadores. Nunca una afición había apoyado tanto... y eso significa que se merecen una alegría ante los gallegos... y dejemos de pensar en el césped. Mañana el césped me da igual. Quiero gente motivada y entregada. Y eso solo se demuestra ganando en intensidad a un equipo bien parido como es el Celta. Juntos podemos. ¡Vamos!