VALÈNCIA. El Levante - Racing de este próximo será un encuentro especialmente relevante: para el equipo en su intención de revertir la delicada situación deportiva en el regreso a Segunda División, y también para un entrenador que ha pasado un primer corte en la dirección del club en medio de su primera crisis en el barco granota. Mehdi Nafti tiene la confianza de Felipe Miñambres, pero más importante para el franco-tunecino parece que será reunir la de un Consejo en que podría cundir el pánico si no se logra la victoria esta próxima jornada.
Por el momento, en el seno de la entidad granota no se da por despedido al técnico en caso consumarse una derrota que pondría el Ciutat patas arriba. Ya en Andorra se escucharon tímidos cánticos contra la esfera directiva del Levante -se entonó suavemente el 'Quico, vete ya' en la grada visitante- y el ambiente en Orriols podría ser irrespirable si el equipo no es capaz de doblegar a uno de los rivales más asequibles de la categoría.