Morales, Roger y los conejos de la chistera

VALÈNCIA. Dos trucos de magia a cero. Ese fue el resultado del derbi de este sábado en el Ciutat de València. Morales y Roger se sacaron un conejo de la chistera cada uno. Primero el valenciano se inventó una asistencia de tacón digna de bucles en telediarios si de otro escudo en el pecho se tratase; después el capitán sacó la carta ganadora de debajo de su manga para sentar a Rulli y marcar el golazo de la jornada. No es el primero de esa factura que ha hecho el Comandante a lo largo de su carrera vestido de azulgrana. Fueron los dos chispazos de ilusionismo que iluminaron un partido plomizo y soporífero desde el primer minuto de juego.

Probablemente era el mejor plan para ahogar al Submarino. El Villarreal anduvo muy alejado de su versión europea y, precisamente, con la derrota en Orriols se queda a tres puntos de la sexta plaza a falta de que la Real Sociedad dispute su encuentro en la actual fecha liguera. Hoy los de Unai Emery quedan anclados en una séptima plaza de dudoso premio continental esta temporada -si el Valencia se alza como campeón de Copa y no clasifica para Europa vía Liga, el séptimo no irá a Conference League, lo hará el sexto-. 

Más allá de cálculos groguets, su maquinaria más básica estuvo estropeada gracias a los tejemanejes levantinistas. Gerard Moreno no apareció, las conexiones centrales con Parejo también fueron desactivadas, y todo eso pasó por una presión agobiante sobre las piezas pensantes del Villarreal. Radoja y Pepelu, clave en esas tareas. Estas son las notas de PlazaDeportiva.com tras el Levante - Villarreal: 

Cárdenas (6): Bien. La buena defensa del Levante evitó que el de Terrassa pasase apuros, pero sí tuvo que actuar en varias ocasiones. Destacó una, ante Yéremy Pino, en la que metió puños. Posición inmejorable para el internacional español, pero se hizo grande el portero titular granota, aunque quizá pudo atajar.

Miramón (6): Luchador. Partido correcto del aragonés, tanto en defensa como en ataque. De hecho, en alguna de sus incorporaciones hizo daño al costado izquierdo del Villarreal. Especialmente duro, respecto a otras citas, cuando fue al barro. Bien en líneas generales, sin grandes alardes.

Róber Pier (6): Sobrio. Encuentro serio y contundente. El '4' levantinista fue bien al choque y se complicó poco, a diferencia de lo habitual, en la salida de balón. Su buen pie esta vez no provocó sustos.

Postigo (6): Regreso. Volvió uno de los capitanes de la plantilla tras dos meses sin jugar. Dejó atrás sus problemas de sóleo, aunque regresó sin capacidad para completar los noventa minutos. Tenía hablado con Alessio el momento en que pidió el cambio... para otra reaparición: la de Mustafi.

Cáceres (5): Lesión. No fue el mejor partido del uruguayo, que se le vio lento y a destiempo en los primeros compases del duelo. Al final de la primera parte pidió el cambio por problemas de isquios. Pruebas el lunes.

Pepelu (7): Tiene las llaves. El '8' es el guardián del centro del campo del Levante. Siempre a un gran nivel, su despliegue en la medular fue clave para ahogar los planes del Villarreal mientras pasaron por la habilidad de Gerard Moreno entre líneas. Alessio movió sus hombres de medio, pero en ningún caso el dianense sale de su rol. El asunto de su renovación se mantiene estancado al tiempo que el jugador asciende en su importancia en el bloque.

Radoja (7): Físico. Gran partido del serbio. Físicamente es de lo más portentoso del equipo y demostró su capacidad, en ese sentido, en la persecución. Recibía Parejo y tenía un hombre encima; lo hacía Gerard Moreno, y probablemente tuviera a un perro de presa, de nombre Nemanja, respirando sobre su cogote. 

Melero (4): Venido abajo. Sin ritmo, con poca incidencia, cada vez menos peso y mala toma de decisiones. Así se define el encuentro de un Melero que vive una temporada de auténticos altibajos. 

Morales (7): Magistral. El Comandante no tuvo demasiado protagonismo a lo largo del choque, en cómputo general, pero cuando aparece es letal. Le cedió Roger el primero y no se le ocurrió fallar ante Rulli. El segundo tanto, una obra de arte. Corrió desde el círculo central para encarar al meta argentino y, con Malsa a su izquierda con la caña preparada, decidió sacarse otro conejo de la chistera. Uno más esta temporada. El enésimo en su vida granota. Sentó a Rulli e invitó al Ciutat a creer en la magia.

Roger (6,5): El mejor socio. La asistencia a Morales de tacón es otro as bajo la manga. Habilitó al capitán y dejó petrificada a la defensa grogueta, que vio como el '11' ya se plantaba solo ante el meta. Pestañearon y se lo perdieron. La sociedad de Pistolero y Comandante reeditó, por momentos, los mejores tiempos pasados.

Son (6): De nuevo a banda cambiada. Fue la solución del técnico para sacar a Franquesa del campo.

Vezo (5): Cumplió. Sin trampa ni cartón. Su mal encuentro en Pamplona le devolvió al banquillo y salió por la lesión de Cáceres.

Campaña (6): Necesario. Salió -silbado por la grada del Ciutat- y superó con creces la aportación de Melero. La realidad es que el sevillano es una figura diferencial en el Levante en lo que a la pelota se refiere. Se ve sobre el tapete.

Mustafi (5): El gran regreso. El alemán volvió a pisar un terreno de juego después de casi cuatro meses de ausencia. Viajó a Pamplona para estar en dinámica de grupo y, esta vez sí, aunque no está para 90 minutos, volvió a una defensa que ahora es de cinco. Formó en el vértice.

Malsa (-)